
Al menos 31 personas han fallecido a causa del reciente brote de ébola en la República Democrática del Congo (RDC), informó hoy jueves un funcionario de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Patrick Otim, funcionario de la oficina regional de la OMS para África, señaló en una conferencia de prensa en línea que se han registrado 48 casos en la provincia central de Kasai, incluidos 38 confirmados. Treinta y un pacientes han fallecido, mientras que 15 siguen en tratamiento en un centro de ébola en la zona sanitaria de Bulape, epicentro del brote, y dos han sido dados de alta.
De acuerdo con Otim, se inició una campaña de vacunación y ya se han entregado unas 760 dosis a Bulape. Se ha vacunado a más de 500 trabajadores sanitarios y contactos cercanos de casos confirmados, y se espera que en los próximos días lleguen 45.000 dosis adicionales a la capital del país, Kinshasa. Sin embargo, indicó que la lejanía de Bulape representa retos logísticos, en especial para el transporte en cadena de frío.
El funcionario afirmó que la transmisión se ha ralentizado luego de las intervenciones, pero instó a permanecer vigilantes y destacó la necesidad de acelerar las pruebas, el rastreo y la vacunación.
"Estamos observando una ralentización de la transmisión... Es un avance muy positivo sobre el que podemos seguir trabajando. Estamos bastante seguros de que, si continuamos por esta senda, junto con el despliegue de la vacunación, debemos ser capaces de controlar este brote lo antes posible", agregó Otim.
El Gobierno de la República Democrática del Congo declaró el brote el 4 de septiembre en Kasai, el decimosexto brote en el país desde que se identificó el ébola por primera vez en 1976. El brote anterior terminó en septiembre de 2022, después de confirmarse un único caso en la provincia de Kivu del Norte. Las pruebas genéticas lo relacionaron posteriormente con la epidemia de 2018-2020 en Kivu del Norte e Ituri, que causó la muerte de casi 2.300 personas.
El ébola es una fiebre hemorrágica muy contagiosa que causa una serie de síntomas como fiebre, vómito, diarrea, dolor generalizado y malestar, y en muchos casos, hemorragias internas y externas, de acuerdo con la OMS.