
Tras un fallo judicial enviado por la jueza de distrito del sur de Florida, Kathleen M. Williams, el gobierno estadounidense frenó el traslado de nuevos reclusos y el desarrollo de infraestructura en la llamada Alcatraz de los caimanes. De acuerdo con Sierra Club, organización no gubernamental (ONG) especializada en el medio ambiente, la prisión para migrantes impulsada por el presidente Donald Trump incurre en fallas medioambientales y de derechos.
Con motivo de la política de criminalización de las personas migrantes, el presidente Trump inició una campaña de encarcelamiento remoto gracias a la participación de su homólogo en El Salvador. Frente a las regulaciones que impidieron al mandatario enviar a personas detenidas a la megacárcel del presidente Nayib Bukele, el mandatario estadounidense recuperó la iniciativa de una prisión basada en la antigua cárcel de Alcatraz.
Bajo la consigna "detendremos a lo peor de lo peor", el Departamento de Seguridad Nacional presumió la prisión de migrantes de más de 100 kilómetros cuadrados en la zona selvática de Miami-Dade. Inaugurada el pasado 1 de julio, el Alcatraz de los caimanes apunta a detener simultáneamente a 5 mil migrantes con base en marco de la gran y hermosa ley de Trump.
Las operaciones de la prisión de migrantes levantaron alertas entre organizaciones civiles, las cuales denunciaron abusos a los derechos humanos ligados con la crisis migratoria estadounidense. La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) solicitó al gobierno detener el proyecto debido a condiciones inhumanas para los detenidos, tales como falta de acceso a agua y condiciones sanitarias.
No obstante, la clave para la acción legal que frenó el traslado y el gasto en infraestructura fue la apelación a las irregularidades y fallas ambientales relacionadas con la cárcel. Según Sierra Club, la construcción y mantenimiento del Alcatraz a los caimanes representa una amenaza para la flora y fauna de Everglades, Florida.
Sherman Neal II, vocero de la ONG del medioambiente, reiteró que la prisión de migrantes de Trump es uno de los peores episodios de la política estadounidense. Subrayó que el Alcatraz de los caimanes no cuenta con las condiciones ambientales, éticas, legales, ni financieras para operar.
Asimismo, el vocero Javier Estevez señaló que esta prisión atenta contra la dignidad humana, y los grupos más vulnerables serán afectados en caso de continuar con las operaciones penitenciarias. Por tales motivos, varias organizaciones celebraron las acciones de la jueza Kathleen M. Williams, y reiteraron que el gobierno de Estados Unidos debe atender otras problemáticas y evitar inversiones multimillonarias en prisiones para migrantes. (NotiPress)