
Brasil está fuera del Mapa del Hambre de la ONU, al haber reducido notablemente el porcentaje de la población en esa situación, informó la organización. A su vez, el presidente del país sudamericano, Luiz Inacio Lula da Silva, celebró este acontecimiento en sus redes sociales.
"Con gran orgullo e inmensa alegría informo de que Brasil ya no está en el Mapa del Hambre, de nuevo (…) eso significa que redujimos la inseguridad grave y la desnutrición a menos del 2,5% de la población, una conquista histórica que muestra que con políticas públicas y compromiso con el pueblo es posible combatir el hambre y construir un país más justo y solidario", expresó el mandatario.
En un comunicado, el ministro de Desarrollo, Asistencia Social, Familia y Lucha contra el Hambre, Wellington Dias, afirmó que sacar a Brasil del Mapa del Hambre de la ONU era un objetivo primordial de Lula al iniciar su mandato en enero de 2023 y que, en principio, se esperaba alcanzarlo en 2026.
Esta es la segunda vez que el Gobierno de Lula retira al país de la lista de la ONU. La primera fue en 2014, después de 11 años de políticas públicas dedicadas a ello, que tienen en el programa social Bolsa Familia de ayuda a los más pobres, su símbolo más reconocido.
El Gobierno brasileño asegura que, tras 2018, "el desmonte de los programas sociales" hizo que Brasil retrocediese y volviese al Mapa del Hambre en el trienio 2018-2020.
No obstante, al retomar esas políticas públicas y con la recuperación económica pospandemia de COVID-19, Brasil logró reducciones históricas de inseguridad alimentaria grave y pobreza.
Hasta finales de 2023, Brasil retiró a 24 millones de personas de la condición de inseguridad alimentaria grave y redujo la pobreza extrema al 4,4 por ciento, un récord histórico, sacando a casi diez millones de personas de esa condición en comparación con 2021.