Inundaciones, calamidad que ya es “normal” en Puebla capital

Con las intensas lluvias en esta época del año, ya es habitual observar a varios vehículos atrapados en medio de las inundaciones que se hacen en algunos puntos de la ciudad.

Desafortunadamente, estos lugares se han caracterizado año con año por tener el mismo problema, que se suma a la falta de pericia o imprudencia de los conductores. 

En la capital poblana, estas son algunas vialidades que llegan a inundarse severamente, por lo que en caso de presentarse una fuerte e intensa lluvia, lo más recomendable es buscar vías alternas y evitar circular por la zona, aunque es difícil hacerlo, porq ue casi todas las vías primarias están afectadas.

-Bulevar Hermanos Serdán (altura de Galerías Serdán)

-Bulevar 5 de Mayo

- Avenida Fidel Velázquez y Blvd. Vicente Suárez (frente al hospital de La Margarita)

-Avenida Juárez

-Calzada Zavaleta

- Diagonal Defensores de la República (altura del Puente Negro)

- 36 Poniente (altura de la Capu)

- 46 Poniente

- Bulevar Forjadores

- Vía Atlixcáyotl (cerca de la caseta Atlixco–Puebla) - Cierres viales por acumulación de agua.

- Bulevar Emiliano Zapata (rumbo a San Miguel y el CERESO)

- Camino Real a Cholula (bajo el puente)

- Bulevar Las Carmelitas 

- Bulevar Esteban de Antuñano

- Avenida 11 sur y Castillotla 

¿ Qué hacer en caso de pasar por una calle inundada ?

En caso de encontrarse con una situación en la que no se puede evitar una calle inundada, lo más recomendable es no arriesgarse y evitar cruzarla si el agua supera la mitad de la rueda del vehículo (aproximadamente 20-30 cm) o la corriente es fuerte.

Ahora, en caso de que se decida cruzarla, lo recomendable es hacerlo lentamente y mantener el motor acelerado de forma constante (sin ir rápido), para evitar que el agua afecte al motor y el vehículo se apague.

En vehículos automáticos, hay que mantener la marcha baja para tener mayor control. En el caso de un auto estándar, hay que evitar el clutch y en caso de hacerlo no hay que sacar el pie del pedal hasta que esté fuera del agua. 

En caso de que el motor se detenga en el agua, no lo reinicies, ya que esto puede provocar que el motor aspire agua, causando daños graves.

Si el agua sube rápidamente o hay corriente fuerte, prioriza tu seguridad. Sal por la ventana si es posible (para evitar que entre más agua al abrir la puerta) y busca un lugar elevado.

Si el agua no es muy profunda y no hay riesgos, intenta mover el vehículo a un área segura. Nunca lo hagas si hay corriente fuerte, ya que pone en riesgo tu vida.

Una vez que pases la zona inundada, presiona ligeramente el freno varias veces para secar los frenos, ya que el agua reduce su eficacia.

Tras conducir bajo una inundación, los daños en el coche están casi garantizados. Cuando la cantidad de agua que entra en un motor no puede ser evaporada por el mismo puede ocasionar afectaciones. Hay que tener en cuenta que cuando un motor se llena de agua, lo que sucede es que esta llega hasta los cilindros, lo que hace que el pistón no pueda subir, impidiendo que haga su trabajo.

Las consecuencias más comunes de una avería por agua en el motor es que se doblen o rompan las bielas, que se fracture la cabeza del pistón, que se fracture el bloque del motor, que haya daño del cárter del motor, casquería o cojinetes, que haya un sellado defectuoso.

En los vehículos modernos hay sistemas de computadoras y sensores, cableado y módulos electrónicos que al estar en contacto con el agua puede provocar cortos circuitos, provocando más daños adversos el aire acondicionado, arranque del motor o sistema de luces.

Tanto las transmisiones manuales como las automáticas son vulnerables al agua, y la infiltración en la caja de cambios contamina el aceite de transmisión, que es esencial para lubricar y enfriar los engranajes y componentes internos.

El daño al interior del vehículo pueda parecer solo estético, pero puede tener consecuencias graves tanto para el auto como para la salud de los ocupantes. La humedad atrapada en alfombras, asientos, tapicería o paneles interiores puede generar hongos y moho, lo que no solo deteriora el vehículo, sino que también representa riesgos para la salud.