
El papa Francisco aprobó este lunes la canonización de Carmen Elena Rendiles Martínez, siendo la primera beata venezolana en convertirse en santa, informó el Vaticano.
"Serán canonizados (…), María del Carmen, religiosa, fundadora de las Siervas de Jesús en Venezuela, que desempeñó con amor su servicio en parroquias y colegios, dedicándose en particular a los más necesitados", detalló la oficina de prensa de la Santa Sede en un boletín.
Rendiles, quien nació en Caracas el 11 de agosto de 1903, se unió en 1827 a la Congregación de las Siervas de Jesús del Santísimo Sacramento.
#Internacional || Vaticano anuncia canonización de la Madre Carmen Rendiles
— Agencia Venezolana de Noticias (@avnve) March 31, 2025
El Papa Francisco ha autorizado la promulgación de decretos que elevan a la santidad a la Madre Carmen Rendiles, fundadora de las Siervas de Jesús, convirtiéndola en la primera santa venezolana.… pic.twitter.com/AQWQYZUG6Q
El 8 de septiembre de 1932 emitió los votos perpetuos y fue nombrada maestra de novicias.
Tras un accidente de coche en 1974, Carmen pasó los últimos años de su vida en silla de ruedas, hasta que falleció el 9 de mayo de 1977.
Beatificada el 16 de junio de 2018, el milagro aprobado para ser declarada santa fue la "curación milagrosa" de una joven a la que en 2015 le fue diagnosticada hidrocefalia triventricular idiopática, informó el Vaticano.
La joven fue sometida a varias operaciones y, tras varias hospitalizaciones, su estado de salud se deterioró, hasta que un día una tía, que participaba en una celebración eucarística ante la tumba de la madre Carmen, rezó por su recuperación.
Otros fieles pidieron entonces a la monja que intercediera, y la propia joven enferma participó en una misa en su sepultura, en la capilla del Colegio Belén de Caracas.
Tras tocar una imagen de la monja la enferma mejoró rápidamente, hasta el punto de que el 18 de septiembre comenzó a caminar y a comunicarse, expresando el deseo de ir a dar las gracias a la madre Carmen, consignó el Vaticano.
Según publica la Santa Sede, la recuperación de la joven fue completa, estable y duradera, y el suceso se juzgó inexplicable desde el punto de vista científico.