"Test del elevador", la prueba de Steve Jobs que aterrorizaba a los empleados de Apple

Steve Jobs fue reconocido como un genio de la tecnología y un visionario que revolucionó la industria con productos como el iPhone, la Mac y el iPod. Sin embargo, de acuerdo con los empleados que lo conocieron, su brillantez iba de la mano con un carácter bastante exigente que generó temor entre los que trabajaban para él.

De acuerdo con el sitio 20minutos, una de las pruebas más conocidas era la llamada “test del elevador”, la cual los empleados intentaban evitar a toda costa. Según narra Michael Dhuey, ingeniero principal en el desarrollo de Macintosh II y la primera versión del iPod, en caso de que un empleado se encontrara con Jobs en el elevador, este tenía un minuto para impresionarlo con la labor que hacía para la empresa, y en caso de no hacerlo, las consecuencias podrían ser devastadoras.

“Steve te hacía preguntas directas sobre tu trabajo y esperaba respuestas contundentes. No le interesaban explicaciones vagas ni titubeos. Si no lograbas impresionarlo, podías recibir una fuerte reprimenda o incluso perder tu empleo”, relató Dhuey.

La presencia de Jobs en las oficinas de Apple llegó a elevar tanto la tensión de los empleados que desarrollaron estrategias para hacerle frente, algunos ensayaban sus respuestas y otros evitaban por completo los elevadores. La incertidumbre de no saber si un viaje de segundos acabaría con la carrera de alguien en la compañía generó un clima de alto estrés entre los empleados.

Los altos niveles de exigencia eran parte del estilo de liderazgo de Jobs, siendo un perfeccionista que no toleraba la mediocridad y exigía la misma pasión por la excelencia en todos los aspectos de Apple.

Con el paso del tiempo, han surgido varios testimonios sobre su carácter inflexible, su obsesión con la puntualidad y algunos aspectos sobre su juventud, como su falta de higiene durante los inicios de Apple.

Sin embargo, más allá de su temperamento y su exigente modo de vida, su impacto en la industria tecnológica es innegable. A pesar de que algunos aseguran que la visión impecable de Steve Jobs ya no está en la compañía, Apple sigue siendo un referente mundial en tecnología y un gigante en la innovación.