El mes de febrero es conocido como el mes del amor, y es común que muchas parejas decidan formalizar su relación mediante el matrimonio civil. Sin embargo, también es cierto que cada vez más parejas optan por vivir en concubinato, es decir, en una relación estable sin formalizarla mediante el matrimonio.
En México, el concubinato es una figura jurídica reconocida en algunas entidades federativas, lo que significa que las parejas que viven juntas sin estar casadas pueden tener algunos derechos y obligaciones similares a los de las parejas casadas. Pero ¿cuáles son las diferencias entre vivir en unión libre y contraer matrimonio?
Comúnmente se conoce como unión libre cuando dos personas deciden vivir en pareja sin un contrato de matrimonio por delante. Jurídicamente, a esta sociedad se le llama concubinato.
Existe la percepción entre algunas parejas que optan por vivir en concubinato, que al no haber un contrato matrimonial, y en caso de no llevarse bien, no habrá consecuencias legales o jurídicas en caso de separación. Sin embargo, aunque no hay un matrimonio formal, las parejas que viven bajo esta figura jurídica generan derechos y obligaciones. Rigen al concubinato todos los derechos y obligaciones inherentes a la familia, en lo que resulten aplicables.
De acuerdo con la ley, el concubinato genera entre los concubinos derechos alimentarios y sucesorios, independientemente de los demás derechos y obligaciones reconocidos por los códigos civiles o leyes de familia de las entidades federativas y otras leyes, como la Ley Federal del Trabajo, Ley Agraria, Ley del Seguro Social, la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, entre otras.
En casos de separación, la ley puede reconocer derechos de alimentos, reparto de bienes y hasta guarda y custodia de hijos en común, dependiendo de las leyes estatales y las circunstancias específicas de cada caso.
Para que exista el concubinato es necesario que no existan impedimentos legales para que esas dos personas contraigan matrimonio, y que hayan vivido en común de forma constante y permanente por el periodo de tiempo que establezca la ley aplicable de cada estado.
Dentro de los efectos jurídicos del concubinato se contempla el derecho a alimentos, derechos sucesorios, presunción de paternidad del concubino respecto de los hijos de la concubinaria, derechos patrimoniales, derechos de seguridad social y derechos de protección de violencia familiar. Además, los hijos nacidos dentro del concubinato tienen los mismos derechos que aquellos que nacieron en el matrimonio.
Una de las grandes interrogantes es si los concubinos tienen derecho a heredar, y la respuesta es sí. Si el concubinato se prolonga hasta la muerte de uno de sus miembros, la concubina o el concubinario que le sobrevive tendrá derecho a heredar en la misma proporción y condiciones que un cónyuge.
Ahora bien, uno pensaría que no hay mucha diferencia, pero lo cierto es que existen algunas ventajas en el matrimonio. Las leyes son muy explícitas, y ambas figuras jurídicas tienen derechos; sin embargo, el contar con un acta de matrimonio le da mayor fortaleza a la unión de ambas personas y le garantiza ciertos derechos. Mientras que en el concubinato, existen derechos que pueden no estar garantizados hasta que no se demuestre la relación de concubinato ante las autoridades competentes.