Recientemente, Ecuador anunció la imposición de un arancel de 27 % a todos los productos importados desde México, en un intento por presionar hacia la firma de un tratado de libre comercio. El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, justificó esta medida al considerar que el actual intercambio comercial no petrolero entre ambos países representa un "abuso" para Ecuador, que enfrenta un déficit comercial negativo en esta relación.
Por su parte, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, minimizó el impacto de estos aranceles, señalando que las importaciones de Ecuador representan solo 0.4 % del total de las importaciones mexicanas. Además, irónicamente comentó sobre los aranceles ecuatorianos diciendo: “Son más ricos los camarones de Sinaloa que los de Ecuador”. Esta cifra sugiere que el efecto económico para México sería mínimo, ya que el comercio entre ambos países es relativamente pequeño en comparación con sus intercambios comerciales con otros socios.
Claudia Sheinbaum se burla de los aranceles de Ecuador contra México: "Son más ricos los camarones de Sinaloa que los de Ecuador".
— Luis Alberto Medina (@elalbertomedina) February 4, 2025
"Ayer pregunté qué tanto importábamos, creo que es el 0.4%. Ya con eso te respondo".
El presidente de Ecuador, @DanielNoboaOk, anunció el lunes que… pic.twitter.com/kYEt4hz0YO
Pero ¿qué pasaría si México hiciera lo mismo con Estados Unidos? ¿Tendría algún impacto real en la economía de la potencia norteamericana o sería un golpe sin consecuencias, como parece haber ocurrido con Ecuador?
Un golpe sin consecuencias para México, pero no lo mismo con Estados Unidos. Para entender mejor la situación, es crucial comparar las dinámicas comerciales entre México y Ecuador con las que existen entre México y Estados Unidos.
La comparación entre las importaciones de México a Ecuador y las de Estados Unidos a México revela diferencias significativas en términos de volumen y relevancia económica. En 2024, las exportaciones mexicanas hacia Ecuador alcanzaron aproximadamente 446 millones de dólares, lo que representa apenas 0.079 % del total de las exportaciones mexicanas. Este bajo porcentaje indica que el impacto de los aranceles impuestos por Ecuador sería mínimo para México, dado que el comercio entre ambos países es relativamente pequeño.
En contraste, las exportaciones estadounidenses a México sumaron más de 253,405 millones de dólares, lo que representa un incremento de 4.2 % en comparación con el año anterior, constituyendo una parte importante del comercio exterior mexicano. Este intercambio significativo implica que cualquier intento de México de imponer aranceles a productos estadounidenses podría tener repercusiones mucho más serias, afectando no solo la economía mexicana, sino también la relación comercial con su principal socio.
Dos escenarios, dos impactos diferentes
Bajo este contexto, la comparación que circula en redes sociales parece inexacta. Si bien Ecuador impuso aranceles a productos mexicanos y México pudo minimizar su impacto, una acción similar contra Estados Unidos tendría un peso completamente diferente. México depende en gran medida de su comercio con el país vecino, mientras que la economía estadounidense es tan grande y diversificada que un arancel impuesto por México difícilmente le haría un daño significativo.
Expertos en comercio internacional coinciden en que los aranceles pueden afectar a sectores específicos, pero difícilmente provocarían una crisis económica en Estados Unidos. En cambio, una medida así podría generar represalias y afectar a la propia economía mexicana, dado que más de 80 % de sus exportaciones tienen como destino el mercado estadounidense.