Conocido por su imponente belleza natural y su vasta extensión de actividad volcánica, el Parque de Yellowstone encendió las alarmas de la comunidad científica debido a nuevos indicios que indican movimiento en su caldera volcánica. Este supervolcán, que lleva casi 70,000 años inactivo, podría estar mostrando señales de un despertar que los expertos catalogan como potencialmente peligroso.
De acuerdo a un estudio publicado en la revista Nature, los depósitos de magma, que están compuestos por material riolítico rico en sílice, se están desplazando hacia la caldera, la cual tiene 55 x 72 kilómetros de diámetro. Este fenómeno fue detectado a través de investigaciones magnetotelúricas que estiman la existencia de 500 kilómetros cúbicos de lava distribuidos en siete áreas del parque.
Nature research paper: The progression of basaltic–rhyolitic melt storage at Yellowstone Caldera https://t.co/bgJrbL23gj
— nature (@Nature) January 2, 2025
El territorio de Yellowstone se formó hace más de 16.5 millones de años gracias a la interacción de una placa tectónica con un punto caliente del manto terrestre, por lo que los científicos lo han tenido en vigilancia constante. Ninfa Bennington, sismóloga e investigadora del estudio, aseguró que esta nueva actividad posiciona al parque como un epicentro de futura actividad volcánica. Sin embargo, señaló que por el momento, la magnitud de una posible erupción es incierta.
Los científicos señalan que si bien, el impacto de una supererupción no provocaría una extinción global, afectaría gravemente la vida humana y el entorno natural como lo conocemos. Por ahora, Yellowstone continúa monitoreado por 46 estaciones sísmicas y 30 estaciones GPS, encargadas de rastrear cualquier cambio en la actividad volcánica.
Los investigadores continuarán trabajando para comprender mejor el comportamiento del supervolcán, resaltando la importancia de anticiparse ante cualquier escenario que pudiera desencadenarse.