Durante una inspección de mantenimiento entre vuelos, fueron encontrados dos hombres sin signos de vida en los compartimentos del chasis del avión de pasajeros Airbus A320-232 (N644JB). Durante la investigación, la aeronave perteneciente a la aerolínea JetBlue se encontrará en el aeropuerto de Fort Lauderdale, en Florida, EEUU.
El 6 de enero, la aeronave, al realizar el vuelo B61801, aterrizó en el aeropuerto de Fort Lauderdale, en el estado de Florida, desde el aeropuerto John F. Kennedy (JFK) de Nueva York. Los trabajadores del aeropuerto que realizaban la inspección técnica y el diagnóstico de la nave fueron quienes descubrieron los cuerpos.
"Los cadáveres fueron encontrados en las aletas de los compartimentos del chasis de un avión en el aeropuerto internacional de Fort Lauderdale-Hollywood durante una inspección rutinaria, después de que el avión hubiera aterrizado", informó JetBlue, citada por el medio AviationSource News.
La identidad de los fallecidos y otros detalles del incidente, en particular cómo acabaron en el compartimento técnico del avión, aún están por determinarse, señala el comunicado de la compañía. Asimismo, la aerolínea expresó su pena por el incidente y declaró que prestará ayuda a las autoridades en la investigación del caso.
Según los datos preliminares, los cadáveres estaban en mal estado, lo que indica que la muerte se produjo hace mucho tiempo. Solo en los seis primeros días de enero, el avión realizó 22 vuelos.
Anteriormente, el 24 de diciembre, una persona muerta fue descubierta en el hueco de la rueda de un avión Boeing 787-10 de la empresa United Airlines, tras aterrizar en la isla de Maui, Hawái. Estos dos incidentes recientes suscitan preocupación por la seguridad aeroportuaria y aérea de Estados Unidos.