La dignidad parlamentaria es la congruencia que debe tener un legislador para actuar con base en lo que establece la Constitución y la ley orgánica, afirmó Pedro Jiménez León, delegado de Movimiento Ciudadano.
En vísperas de la publicación de su libro "Dignidad Parlamentaria", en el cual narra el acontecimiento histórico en la vida política del país y en especial del estado de Tabasco, Jiménez León platicó con Imagen Poblana sobre este hecho y cómo repercutió en el futuro en acontecimientos similares y las consecuencias de la falta de este valor.
El oriundo de Tabasco refirió que su libro maneja un título que actualmente está de moda por la ausencia de dignidad en la mayoría de los parlamentos, tanto estatales como federal, porque están sometidos a los Ejecutivos. En este sentido, refirió que México vive una involución política, ya que se respiran aires similares a los de los años 70 o mediados de los 80 del siglo pasado.
"Este retroceso está actualmente con la desaparición de las páginas de transparencia, vamos caminando hacia atrás", precisó el delegado naranja, y agregó que se construyó una narrativa seductora pero peligrosa para el país, porque todo lo que se había ganado en años atrás, hoy se está perdiendo.
"Hoy hay un margen de maniobra muy reducido del presupuesto, hay disminuciones importantes en diversos rubros. La energía que tenía este país y el crecimiento era gradual, pero hoy está disminuyendo. Se ha desincentivado la inversión extranjera directa y la inversión nacional", dijo.
En este sentido, aseguró que los gobiernos no son los que generan riqueza, sino los propios empresarios y Puebla fue el claro ejemplo de un episodio similar durante la gestión de Miguel Barbosa, el cual fue revertido gracias a la dignidad parlamentaria de los diputados de la anterior legislatura y la llegada de Sergio Salomón Céspedes a la gubernatura.
"La economía, cuando gobernaba Miguel Barbosa, prácticamente no creció, no había relación con los empresarios; cuando se da el cambio, por un acto de dignidad parlamentaria en el Congreso poblano, llega un gobernador sin resentimientos ni rencores y convoca a un reencuentro y a una reconciliación, y hemos visto el crecimiento que tuvo Puebla en estos dos últimos años. Entonces, sí hace diferencia quien está en el gobierno, pero sobre todo en qué emocionalidad está quien gobierna".
Reseñando esta experiencia, Jiménez León recordó que gracias a los actos sucedidos en el 95, durante la crisis política que se vivió en Tabasco, se han presentado dos casos de dignidad parlamentaria en México.
El primero de ellos, en el estado de Morelos en 1997, cuando el gobierno federal decide quitar al entonces gobernador Jorge Carrillo Olea, quien ya había cumplido 4 años al frente de la administración.
"Pero con la experiencia de Tabasco, dos años antes, los diputados locales se ponen de acuerdo y designaron gobernador, al diputado Jorge Morales", apuntó el delegado, asegurando que hubo buenos resultados durante los dos últimos años del sexenio.
Y el otro caso de dignidad parlamentaria es el que se presentó en Puebla, con la muerte del exmandatario Miguel Barbosa, y el Congreso local, en un acto hacer valer la Constitución, designa al entonces diputado Sergio Salomón como el gobernador del estado, lo que provocó que el expresidente Andrés Manuel López Obrador descalificara a los legisladores.
"Me comunica Fernando Morales lo ocurrido y le escribo: 'oye, tienes que sacar tres acuerdos rápidos: primero, la decisión tómenla en el Congreso, el gobernador sustituto tiene que ser un diputado y tercero, no debe estar casado con ninguno de los dos grupos que buscan la gubernatura, porque rompe el equilibrio", refirió.
Finalmente, dijo que los gobernadores que se eligieron en los congresos locales tienen como característica principal que cumplieron y culminaron su gestión, de dos años, con buenos resultados.
"Dignidad parlamentaria" saldrá a la venta el 20 de enero
En el libro "Dignidad Parlamentaria", Pedro Jiménez aborda la crisis política que se vivió en Tabasco en 1995, tras ganar las elecciones el candidato del PRI Roberto Madrazo Pintado.
Su autor señala que en esta publicación narra el acontecimiento, sucedido en la década de los 90, cuando el PRI pasó de ser un partido hegemónico a un partido dominante y en donde aparece por segunda ocasión en una contienda estatal Andrés Manuel López Obrador.
Una contienda que al final perdió, pero fiel a su costumbre de presionar políticamente y con la ayuda de Porfirio Muñoz Ledo logran convencer al entonces presidente Ernesto Zedillo Ponce de León de que les fuera entregado Chiapas y Tabasco.
"Porfirio Muñoz Ledo reconoció que llegaba a las 9 de la noche a Los Pinos para asesorar al presidente Zedillo y en una de esas asesoradas, lo convenció de que, así como Salinas de Gortari concertacesionaba con el PAN y les entregaron Baja California, Guanajuato y San Luis (Potosí), era momento de que Zedillo concertacesionara con el PRD y pidieron Chiapas y Tabasco".
Y fieles a la manera tradicional, la Secretaría de Gobernación llama a los gobernadores de Chiapas y Tabasco, con la orden de entregar sus licencias a los congresos estatales y las cuales deberían ser aprobadas. Y es aquí donde comienza toda una serie de sucesos que marcaron la vida política del país y del estado de Tabasco.
La publicación del libro será el 20 de enero y estará en librerías del país, así como en las plataformas en línea.
