Los avances en inteligencia artificial llevaron a la creación de chatbots diseñados para interactuar con usuarios en diversas situaciones. Lo que inició con preguntas de cultura general rápidamente pasó a la oportunidad de asignar trabajos administrativos densos y tediosos. Sin embargo, esta herramienta se está utilizando también como apoyo emocional.
Uno de las plataformas dedicadas específicamente a esto último es Therapist GPT, un chatbot programado para escuchar, ofrecer consejos y proporcionar estrategias de afrontamiento a quienes lo necesitan. Aunque este tipo de tecnología no reemplaza la terapia profesional, cada vez más personas exploran su uso como una herramienta complementaria para su bienestar emocional.
Mya Dunham, una joven de 24 años de Atlanta, le comentó a CNN que recurrió a un chatbot como alternativa para expresar sus sentimientos. Según explica, prefiere la interacción con un bot porque no genera la incomodidad de ser juzgada. Dunham asegura haber encontrado en este sistema una perspectiva distinta y un espacio accesible para hablar sin restricciones. No obstante, este fenómeno también despierta dudas. Al compartir su experiencia en redes sociales, algunos usuarios apoyaron su elección, mientras que otros cuestionaron la confiabilidad y ética de estos programas.
De acuerdo con los expertos en salud mental, tienen tantos beneficios como riesgos. Russell Fulmer, experto en inteligencia artificial aplicada a la psicología, los chatbots pueden ser útiles en casos de ansiedad o depresión leves, pero enfatiza que deberían utilizarse en combinación con un terapeuta humano. Fulmer subraya que estas herramientas carecen de las habilidades complejas de empatía y análisis profundo que un terapeuta humano puede ofrecer.
Por su parte, Marlynn Wei, psiquiatra con experiencia en aplicaciones tecnológicas, señala que los chatbots generales pueden carecer de parámetros de seguridad adecuados y, en ocasiones, proporcionar información incorrecta. Esto plantea desafíos éticos y prácticos, especialmente para usuarios menores de edad o en situaciones de vulnerabilidad. Empresas como Character.AI enfrentaron demandas por presuntos daños causados por sus chatbots.
A pesar de estas preocupaciones, algunos consideran que los chatbots son una opción accesible para quienes enfrentan barreras económicas o logísticas para acceder a terapia profesional. Estas herramientas, disponibles las 24 horas, podrían representar una alternativa válida en determinados casos, siempre que los usuarios sean conscientes de sus limitaciones.
El psiquiatra Dr. Daniel Kimmel, quien estudió el comportamiento de chatbots en sesiones simuladas, destaca que estos sistemas pueden reproducir técnicas terapéuticas básicas. No obstante, recalca que su capacidad de comprensión y personalización sigue siendo limitada en comparación con la interacción humana. (NotiPress)