Delitos del fuero común y federal, ¿cuál es la diferencia?

En México, el sistema judicial se divide en dos jurisdicciones: el fuero federal y el fuero común. Aunque ambos se encargan de juzgar y sancionar delitos, existen diferencias importantes entre ellos.

El fuero federal se refiere a la jurisdicción que tiene competencia para juzgar delitos que afectan intereses federales o que se cometen en contra de la federación. Estos delitos incluyen:

• Delitos contra la seguridad nacional.
• Delitos contra la salud pública, como el tráfico de drogas.
• Delitos contra la economía, como la evasión fiscal o el lavado de dinero.
• Delitos contra la migración, como la trata de personas.
• Delitos cometidos en contra de funcionarios o instituciones federales.

Por otro lado, el fuero común se refiere a la jurisdicción que tiene competencia para juzgar delitos que no afectan intereses federales y que se cometen en contra de particulares o de la sociedad en general. Estos delitos incluyen:

• Homicidio.
• Robo.
• Lesiones.
• Violación.
• Delitos contra la propiedad, como el hurto o el daño.

Una diferencia importante es que los delitos del fuero federal se juzgan en tribunales federales, mientras que los delitos del fuero común se juzgan en tribunales estatales o municipales.

¿Pueden ser investigados delitos del fuero común por autoridades federales?

La respuesta es sí: las autoridades federales pueden investigar delitos del fuero común en ciertos casos. Aunque la competencia para investigar y juzgar delitos del fuero común corresponde a las autoridades estatales, existen excepciones en las que las autoridades federales pueden intervenir.

Una de las excepciones más comunes es cuando el delito del fuero común tiene una conexión con un delito federal. Por ejemplo, si un homicidio cometido en un estado tiene relación con el tráfico de drogas, que es un delito federal, las autoridades federales pueden intervenir en la investigación.

Otro caso es cuando se trata de delitos cometidos en contra de funcionarios federales o de instituciones federales. Por ejemplo, si un funcionario federal es víctima de un secuestro o un homicidio, las autoridades federales pueden investigar el delito. Además, las autoridades federales también pueden intervenir en la investigación de delitos del fuero común cuando se trata de delitos que afectan la seguridad nacional o la economía del país. Por ejemplo, si un delito de robo o secuestro tiene relación con una organización criminal que afecta la seguridad nacional, las autoridades federales pueden intervenir en la investigación.

Es importante destacar que, aunque las autoridades federales pueden investigar delitos del fuero común en ciertos casos, la competencia para juzgar estos delitos sigue correspondiendo a las autoridades estatales. Por lo tanto, una vez que las autoridades federales han investigado el delito, deben remitir el caso a las autoridades estatales para que se juzgue.

¿Cuándo un delito del fuero común pasa a ser del fuero federal?

• Si un delito del fuero común tiene una conexión con un delito federal, como el tráfico de drogas, el lavado de dinero o el secuestro, puede pasar a ser del fuero federal.
• Si un delito del fuero común se comete en contra de un funcionario federal o una institución federal, como un juez federal, un agente de la Fiscalía General de la República o una oficina de correos, puede pasar a ser del fuero federal.
• Si un delito del fuero común afecta la seguridad nacional o la economía del país, como un atentado contra la infraestructura crítica o un delito de corrupción que afecta la estabilidad financiera del país, puede pasar a ser del fuero federal.
• Si un delito del fuero común se comete con violencia o intimidación, como un homicidio o un secuestro, y tiene una conexión con un delito federal, puede pasar a ser del fuero federal.
• Si un delito del fuero común se comete en un lugar federal, como una base militar, un aeropuerto o una oficina federal, puede pasar a ser del fuero federal.