Elementos de la Policía Municipal de Cuautlancingo confirmaron el hallazgo de una bolsa negra para basura que contenía huesos humanos, algunos de ellos con tejido, aunque no estaban completos.
Habitantes del fraccionamiento San Ángel Inn llamaron a los números de emergencia para informar que llevaban un par de días percibiendo un fétido olor, que tenía su origen en un terreno baldío junto al residencial, en la Avenida Morelos.
Algunos pensaron que se trataba de un animal muerto, pero los uniformados confirmaron que se trataba de una bolsa para basura que, al abrirla, contenía un cráneo, la columna y un fémur.
Es decir, en la bolsa metieron la cabeza, el torso y una pierna, pero el resto del cuerpo se desconoce su paradero.
La Fiscalía General del Estado ya lleva a cabo las investigaciones para determinar el género de la víctima, las causas de la muerte y, eventualmente, su identidad.