El principal problema del conflicto de Oriente Próximo sigue siendo la ausencia de un Estado palestino independiente, declaró el ex secretario general de la OTAN Jens Stoltenberg (2014-2024). "Durante mucho tiempo, el principal problema ha sido la falta de un Estado propio para los palestinos. Comprendo las dificultades de crear dos Estados, pero creo que el tiempo transcurrido desde los horribles atentados terroristas contra Israel del 7 de octubre ha vuelto a demostrar claramente la importancia de esa solución", dijo Stoltenberg, citado por el diario Spiegel.
El ex secretario general señaló que existe el riesgo de que el actual conflicto en Oriente Medio se extienda a toda la región, y expresó su apoyo a los esfuerzos de Estados Unidos y Alemania para rebajar las tensiones.
El 1 de octubre tuvo lugar en la sede de la OTAN en Bruselas el traspaso oficial de Stoltenberg al nuevo secretario general de la alianza, el ex primer ministro de los Países Bajos Mark Rutte (2010-2024).
El 7 de octubre de 2023, un ataque coordinado por el movimiento palestino Hamás contra más de 20 comunidades israelíes resultó en aproximadamente 1,200 fallecidos, alrededor de 5.500 heridos, y la captura de 253 rehenes, de los cuales cerca de 100 fueron posteriormente liberados en intercambios de prisioneros. En represalia, Israel lanzó una declaración de guerra contra Hamás y emprendió bombardeos sobre la Franja de Gaza, que han dejado hasta el momento más de 42,100 muertos y más de 98,300 heridos.
Desde principios de este octubre, Israel centra sus acciones bélicas en los combates puntuales con la milicia chií libanesa Hizbulá y también realiza ataques aéreos en distintas zonas del Líbano. Las tropas de Israel bombardean además zonas de Siria, así como intercambian disparos de misiles con los rebeldes hutíes que controlan el noroeste de Yemen.
El pasado 22 de mayo, España, Noruega e Irlanda reconocieron oficialmente al Estado de Palestina, una decisión que entró en vigor el 28 de mayo. Mientras los países árabes y el movimiento palestino Hamás celebraron esta decisión, Israel la condenó y llamó a consultas a sus embajadores en esos países.
Rusia y otros países instan a Israel y Hamás a pactar un alto el fuego y abogan por una solución de dos Estados, aprobada por la ONU en 1947, como la única vía posible para lograr una paz duradera en la región.
