Huracán Helene deja una ola de destrucción y de deepfakes a su paso por EU

El huracán Helene, considerado uno de los más destructivos en Estados Unidos, no solo dejó un rastro de destrucción, sino que también dejó una peligrosa ola de desinformación en redes sociales. En medio de las imágenes reales de la tragedia, varias imágenes falsas creadas con inteligencia artificial (IA), conocidas como deepfakes, surgieron en internet.

Una de las imágenes que más se viralizó es la de una niña llorando mientras abraza un cachorro en una calle inundada. Aunque pareciera conmovedora a simple vista, por medio de un examen más detallado, Forbes señaló que la imagen presenta inconsistencias, como cambios en la ropa de la niña y el color del pelaje del cachorro, los cuales delatan su manipulación.

Algunas figuras públicas, como el senador Mike Lee de Utah, fueron víctimas de esta desinformación en redes sociales. Mike Lee compartió la imagen en su cuenta de X con la leyenda “Caption this photo”; sin embargo, eliminó la publicación cuando le avisaron que era falsa.

Ante esta situación, los expertos aconsejan a los usuarios estar atentos a los detalles visuales, así como verificar las fuentes y desconfiar de imágenes que apelan fuertemente a las emociones. En tiempos de crisis, saber distinguir entre la verdad y la manipulación se vuelve esencial para asegurar una respuesta informada y efectiva ante las adversidades. Algunas maneras de distinguir estas imágenes son:

• Inconsistencias visuales: las imágenes creadas con IA tienen pequeños detalles que no cuadran con la representación, algunos cambios pueden ser sutiles, como el cambio de ropa, el entorno y los elementos que lo rodean, pueden ser indicios de que se trata de un deepfake.
• Calidad: las imágenes de IA pueden contener algunos elementos borrosos, como el borde de los objetos o de las personas. Incluso pueden tener rasgos faciales falsos o suavizados.
• Anomalías: la mayoría de las imágenes deepfake comparten el error de tener una representación incorrecta de las manos o los dedos de las personas.
• Verificar la fuente: antes de compartir un contenido, es importante verificar la fuente original. Algunas plataformas de redes sociales ya etiquetan los contenidos como “alterados” o “creados con IA”, pero estas etiquetas no siempre llegan oportunamente.