En Lomas de Angelópolis iniciará en próximos días la prueba piloto del primer tope inteligente en Puebla. Será el bulevar de las Cascadas, ubicado en el fraccionamiento perteneciente al municipio de Santa Clara Ocoyucan, donde se instalará esta herramienta con el propósito de controlar la velocidad de los vehículos.
Este novedoso sistema llamado RVI (Reductor de Velocidad Inteligente) emplea un moderno sistema de sensores que pueden monitorear la velocidad de los vehículos que transitan por el camino y reaccionar en consecuencia. Consiste en la instalación de tres sensores, colocados sobre la vialidad a una distancia prudente entre cada uno de ellos y serán los encargados de medir la velocidad de los automóviles.
Los RVI se mantienen elevados cuando el conductor excede los límites de velocidad y se retraen cuando se respetan, permitiendo un flujo constante sin necesidad de frenar. El estado natural del Tope Inteligente es permanecer elevado por cuestiones de seguridad para que no suba de repente y, como apoyo, habrá un semáforo al lado de este, en el que una luz amarilla indica que está arriba, mientras que la verde es para indicar que bajó y se continúe con el paso normal.
A partir de esta semana continuarán los trabajos para la instalación del tope, por lo que habrá cierre de carriles a la altura de Parque Habana, en sentido hacia Cascatta. Se estima que el 7 de octubre esté concluida la obra para dar paso a la prueba piloto.
Este proyecto forma parte de lo que se conoce actualmente como Infraestructura Inteligente, que consiste en el uso de tecnologías avanzadas y sistemas de información para mejorar la eficiencia, sostenibilidad y calidad de los servicios públicos y urbanos, entre los que destaca el sistema de tránsito y gestión de tráfico inteligentes, carreteras y puentes con sensores y tecnologías de comunicación.
El sistema de Topes Inteligentes fue desarrollado por Juan Carlos Ortiz, oriundo de Morelia, Michoacán, lugar en donde ya llevan varios años haciendo pruebas con prototipos en la vía pública y privada, obteniendo buenos resultados y logrando un aumento de la conciencia vial entre los conductores. De igual forma cuenta con tres prototipos en funcionamiento, dos de ellos situados en el Área Metropolitana de Naucalpan, siendo la primera zona en tener un Tope Inteligente en la vía pública, y hay uno en un predio privado.
¿La cultura vial de los conductores poblanos es apta para adoptar esta infraestructura?
Desgraciadamente, la cultura vial en Puebla es prácticamente nula. Muy pocos son los conductores que cuentan con la paciencia para soportar los estragos del tráfico. Y es muy común observar en el día a día conflictos vehiculares entre particulares y con el transporte público.
La imprudencia y la falta de empatía son una constante en las vialidades de la Angelópolis, es muy clásico ver el típico "laminazo" entre conductores que llevan prisa por llegar a su lugar de destino.
Por ello, sería muy difícil que se obtengan resultados óptimos de aplicarse este mecanismo de seguridad en las principales avenidas de la ciudad. Desde temprana hora las personas inician su día con reloj en mano. Ya sea para acudir al trabajo, a la escuela, o a alguna otra actividad, es común observar gente conduciendo a altas velocidades, sin respetar los límites, a los peatones, la señalética en el asfalto, los semáforos y mucho menos a los ciclistas o motociclistas.
A este panorama le agregamos el tema del transporte público, servicio que a diario hace de las calles de Puebla una pista de carreras. Se ve muy lejano que pueda adoptarse esta infraestructura en la ciudad, aunque no dejaría de ser un experimento social interesante, tomando en cuenta todos estos factores.
