Transporte público del país, más caro que el de Puebla pero con mejores condiciones

El viernes 27 de septiembre volvió a suscitar una manifestación en las inmediaciones de Casa Aguayo, en esta ocasión por parte de los concesionarios del transporte público que exigen un nuevo aumento en las tarifas del servicio. Con el argumento de que “es el costo real del servicio”, pidieron que el pasaje suba de 8.5 pesos a 19 pesos, afirmando que en Puebla los cobros son de los más bajos del país.

En su protesta, los transportistas pedían una reunión con el titular de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMT) para externarle su deseo de que el pasaje suba a más del 100 %. Además del bajo costo, sostienen que el aumento del 2019 fue insuficiente ante los descuentos que dan, pese a que muchos no cumplieron el acuerdo de modernizar las unidades y mejorar el servicio.

No obstante, la principal queja es que las tarifas actuales son bajas en comparación con lo que cobran en otras entidades del país. Si bien ese reclamo tiene parte de razón, en las entidades donde el cobro de pasaje es más elevado, por lo general es de mejor calidad, con unidades en mejor estado y un servicio más profesional.

Las tarifas en otros estados

En la capital del país, la Ciudad de México, los costos son mucho menores a los de Puebla y en la mayoría de los casos se mantiene en esa línea. De acuerdo con la Secretaría de Movilidad, el colectivo tiene una tarifa de cinco pesos, mientras que el metrobús está en seis pesos y 30 con servicio al aeropuerto, siendo esa la tarifa más cara de toda la entidad.

A diferencia de Puebla, en la CDMX tienen transporte eléctrico con tarifas de cuatro pesos el trolebús, tres el tren ligero, siete el trolebús elevado, la avenida aztecas y nochebús. Por otra parte, el cablebús cuesta siete pesos, el el RUTA cuesta seis, 6.5, siete, 7.5 y ocho pesos, dependiendo el recorrido. Otras como el RTP van de dos a siete pesos, o el Corredor y Zonales van de 7.5 a ocho pesos.

Por otra parte, en el estado de Yucatán, el sistema llamado “Va y Ven” de transporte público tiene una tarifa de 12 pesos, pero al momento de hacer un transbordo baja a seis pesos y sin costo en el tercer transbordo. Con descuentos sociales a niños, adultos mayores o estudiantes, las tarifas son de cinco pesos el viaje inicia, 2.5 y cero con los respectivos transbordos.

La entidad también ofrece rutas nocturnas con tarifas iniciales de 15 pesos, 7.5 en el primer transbordo y sin costo en el tercer; para los descuentos las tarifas son de cinco, 2.5 y cero pesos, respectivamente. Cabe señalar que, a diferencia de lo que pasa con Puebla, donde el pasaje se paga en efectivo, a excepción del RUTA, en Yucatán se utiliza la tarjeta de prepago de Va y Ven.

En la entidad el colectivo tiene unidades modernas para el uso de usuarios con discapacidad, híbridas y amigables con el medioambiente, y con alicientes como aire acondicionado, cargadores USB, pantallas, rack para bicicletas. También es más seguro, pues del 2018 al 2023, el porcentaje de personas que se sintieron a salvo pasó del 66.5 % al 79 %, pero aquí el 77 % se siente inseguro.

En Nuevo León también hay tarifas más elevadas que en Puebla, pero ahí también hay una marcada diferencia en los precios, y a la par, en la calidad que ofrecen. Las rutas urbanas cuestan 12 pesos si se paga en efectivo, mientras que otras como la del programa “Muevo León” tiene tarifas de 15 pesos en efectivo. Por su parte, el sistema Transmetro tiene un costo de 15 pesos por aplicación.

El caso de Nuevo León también contrasta con el de Puebla en diferentes vertientes. Por ejemplo, aquí hay rutas que ya no aceptan pago en efectivo y el cobro se da por medio de una aplicación, “Urbani”, así como con tarjetas “Spin” de Oxxo, “Mía” y “Me Muevo”, donde las tarifas van hasta los 13 pesos.

Ahí también es evidente la diferencia en las unidades del transporte público, ya que cuentan con aire acondicionado, cámaras de vigilancia, botones de asistencia y de pánico, accesibilidad con rampas, espacio para sillas de ruedas y asientos para usuarios que cuenten con alguna discapacidad. Están conectados a instancias de seguridad, tienen wifi y son de bajas emisiones.

Por último, el estado con las tarifas más altas del país es Baja California, donde a mediados de este año el pasaje aumentó de 15.5 a 20 pesos si se paga en efectivo, aunque se mantuvo en 15.5 para los que usan tarjetas de prepago o la aplicación “Stopbus Mexicali” o descuento del 50 % en la tarifa para estudiantes, tercera edad y discapacitados, todo esto en las rutas de la zona urbana.

Si bien es el más caro de México, esto se ve reflejado en la calidad del servicio, toda vez que las unidades son más modernas, no requieren portar efectivo, beneficios en caso de transbordo. La aplicación Stopbus Mexicali también da la posibilidad de ver en tiempo real el recorrido de las unidades, lo que hace más fácil ver qué tan lejos están del usuario.

Por si fuera poco, en dicha entidad también se prioriza la profesionalización de los operadores a fin de brindar un servicio más seguro. Otro distintivo son programas como “Mujeres al Volante” y “Transporte Violeta”, donde las operadoras son mujeres y se da más seguridad al momento de abordar una unidad.