En lo que se considera un extraño caso médico, un joven sirio descubrió que el constante goteo nasal que sufría desde hace seis años, se trataba de una fuga de líquido cerebral. El caso fue publicado en la revista Medical Case Reports y muestra una inusual condición provocada por un traumatismo craneoencefálico.
El joven de 20 años, no solo sufría de goteo nasal permanente, sino que también padecía de dolores de cabeza y convulsiones, síntomas que comenzaron después de un accidente automovilístico. Seis años después, tras hacerse unos estudios radiológicos, descubrió que tenía una fractura en la base del cráneo junto a un encefalocele, una rara condición en la que el tejido cerebral se hernia y sale a través de orificios en el cráneo, en este caso, hacia la cavidad nasal.
A pesar de que el encefalocele es un defecto congénito poco común, en el caso de este joven fue provocado por el accidente y como resultado de haber rechazado el tratamiento para las lesiones que sufrió. Esto llevó a que se desarrollara una meningoencefalitis dos meses antes de presentarse al hospital.
Los médicos tuvieron que intervenir quirúrgicamente para reparar las meninges, devolver el tejido cerebral a su lugar y reconstruir la base del cráneo con cemento óseo y biopegamento. Finalmente, la cirugía fue un éxito y el paciente fue dado de alta dos días después sin presentar complicaciones.