Por falta de reglamentos e instituciones, Puebla no está lista para un sismo: CICEPAC

El Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Puebla (CICEPAC) señaló que Puebla requiere reglamentos bien definidos e instituciones a fin de estar preparados ante un eventual sismo en el estado. En toda la entidad solamente el municipio de Puebla cuenta con una norma para la seguridad de sus edificios, mientras que en resto ignora el problema.

El presidente del CICEPAC, Enrique García Fuentes, sostuvo que Puebla debe prepararse para un posible sismo a fin de evitar daños como los que se registraron el 19 de septiembre de 1985 o de 2017. Dijo que a día de hoy la entidad no está lista para un escenario similar y esto se ve reflejado en el nulo nivel de reglamentación para construcción que hay en el estado.

Aseguró que no hay una norma técnica complementaria de diseño por sismos en casi todo el estado, pues sólo el municipio de Puebla cuenta con tres que fueron creadas por el propio CICEPAC y que están incluidas en el Código Reglamentario para el Municipio de Puebla (Coremun). Estas son las normas técnicas reglamentarias para el Diseño de Sismo, la de Cimentación y de Dictamen de Estructura.

Resaltó la importancia de este tipo de normas porque van de la mano con los reglamentos que establece cada municipio y ayudan a tener mejores condiciones en los edificios en caso de un sismo.

A esto se suma que en Puebla no hay un Instituto para la Seguridad de las Construcciones como el que existe en la Ciudad de México y que es el encargado de supervisar la aplicación de las normas y reglamentos en la materia. Esto sucede incluso cuando tal dependencia se propuso en la Ley de Construcción aprobada este año.

“Que exista el Instituto para la Seguridad de las Construcciones, para que todas las contribuciones que hacemos desde el punto de vista técnico, se trasladen a mejoras en los reglamentos. Eso va a dar mejores construcciones”, dijo García Fuentes.

Por otra parte, el especialista Carlos Ramos Moreno detalló que hay zonas vulnerables como lo es el centro histórico de la ciudad de Puebla, del que, afirmó, no se sabe cuál es su estado de conservación. Explicó que debido a la antigüedad de algunos edificios y monumentos, no hay registros de las intervenciones que han tenido ni de los materiales empleados en su edificación.

Asimismo, dijo que el desconocer la historia de los edificios históricos y monumentos genera incertidumbre en cuanto a su resistencia en caso de un sismo. Es por esto que se requieren estudios por parte del gobierno, así como llevar a cabo monitoreos para saber cuál es su estado y qué riesgo representan en caso de un movimiento telúrico.

“Con base en la configuración arquitectónica y estructural, podemos llegar a conclusiones de qué tan vulnerable puede (un edificio) ser”, finalizó.