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El 18 de septiembre es el Día Internacional de la Igualdad Salarial, una fecha establecida por la ONU en 2020 con el objetivo de concientizar sobre la importancia de lograr la igualdad salarial entre hombres y mujeres. De acuerdo con este organismo, la brecha salarial de género es un problema persistente en todo el mundo y se estima que las mujeres ganan en promedio un 23 % menos que los hombres.
Según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), que midió la brecha de ingresos entre hombres y mujeres en diferentes sectores en México, su último estudio hecho en 2022 destacó que existen sectores en los que las mujeres ganan en promedio más que los hombres.
Este informe señala que esta diferencia de ingresos es más amplia en los servicios inmobiliarios, la construcción y la minería. Estos sectores se caracterizan por una baja representación de mujeres, quienes suelen acceder a mejores empleos.
El estudio menciona que solo el 4 % de las personas que laboran en la construcción son mujeres, pero la mayoría cuenta con estudios de licenciatura, lo que les permite acceder a puestos administrativos, donde obtienen mayores ingresos promedio que los hombres. En este sector, las mujeres ganan hasta un 33 % más que los hombres.
En el sector de la minería, las mujeres ganan un 25 % más que los hombres. Esto se debe a que su participación ha aumentado gracias a los avances tecnológicos, la automatización de procesos y la capacitación necesaria para operar maquinaria especializada. Las mujeres pueden desempeñar diversos roles en la minería, como conductoras de camiones, operarias de maquinaria pesada, técnicas, geólogas, ingenieras, traductoras, sociólogas y asistentes sociales.
En el sector inmobiliario, la presencia de mujeres es mayor y esto se refleja en los salarios. En esta industria, la mayor brecha de género es desfavorable para los hombres, ya que las mujeres ganan en promedio un 43 % más que ellos.
En el sector salud, las mujeres a menudo ganan más que los hombres. Por ejemplo, las enfermeras suelen recibir salarios más altos que los enfermeros debido a su predominancia en la fuerza laboral. Además, en campos médicos como la obstetricia y la ginecología, las especialistas femeninas tienen una ventaja salarial debido a la preferencia de las pacientes por ser atendidas por profesionales del mismo género.
En el modelaje, la brecha salarial es considerable, ya que las modelos ganan significativamente más que los modelos, superándolos en algunos casos hasta diez veces. La moda femenina es un mercado más grande y el trabajo es mejor remunerado y más abundante.
Otro campo donde las mujeres suelen tener mayores ingresos que los hombres es en la gestión de recursos humanos. Dado que las habilidades de comunicación, empatía y resolución de conflictos son altamente valoradas en esta área, las mujeres han sobresalido y obtienen compensaciones competitivas.
Según la American Chamber México (AmCham), aunque la brecha salarial entre hombres y mujeres se ha reducido, actualmente las trabajadoras ganan un 20 % menos que los trabajadores, ejecutando la misma labor. Además, se señala que cerrar la brecha salarial de género equivaldría a sumar siete billones de dólares a la economía mundial.
En la actualidad, en México, la brecha salarial se reduce cada vez más en campos de la ciencia, tecnología, ingeniería, matemáticas, salud y educación universitaria.
