Ropa de baja calidad y daños al ambiente, “bondades” de la “Moda Rápida”

Ropa de baja calidad y daños al ambiente, “bondades” de la “Moda Rápida”

Foto: Freepik

La fast fashion o moda rápida es un concepto que cada vez toma más relevancia; no es necesariamente un estilo de ropa, sino mucho más un modelo industrial o de producción que busca la velocidad y la disponibilidad constante.

 

Es una tendencia que han adoptado muchas marcas de ropa y que se caracteriza por la producción rápida de prendas a bajo costo, con el objetivo de satisfacer la demanda constante y cambiante del mercado.

 

La moda rápida se asocia con el concepto de desechable, lo que significa que las prendas están diseñadas para ser usadas durante una temporada y luego reemplazadas, sin especial atención a la durabilidad en el tiempo. Incluso, las marcas de moda rápida pueden producir hasta 52 colecciones por año, lo que significa que hay nuevas prendas en las tiendas cada semana.

 

En este tipo de prendas, los principales materiales que se utilizan son poliéster y algodón, especialmente el primero. Esta es una resina plástica derivada del petróleo que permite producir a costos mínimos y además es muy contaminante.

 

 

Esto significa que para mantener los precios bajos y la facturación alta, las marcas de moda rápida suelen utilizar materiales baratos y de baja calidad, que no están hechos para durar, lo que crea un ciclo de residuos y contaminación.

 

Además, el impacto negativo al ambiente es grave, ya que se necesitan miles de litros de agua para producir una sola prenda de ropa, lo que ha llevado a la escasez de agua en algunas regiones del mundo.

 

En cuanto a los procedimientos aplicados, se apuesta por una producción veloz y muy flexible. El objetivo es acortar al máximo los tiempos de elaboración y sus costos. Para ello, se utilizan procesos manuales en condiciones laborales precarias, llevadas a cabo en los países más desprotegidos laboralmente del mundo.

 

En conclusión, el problema con las marcas de moda rápida es que producen prendas a gran escala a un costo muy bajo, lo que a menudo significa que los trabajadores que la producen no reciben un salario justo y trabajan en condiciones peligrosas.

 

Además, la producción de moda rápida tiene un impacto ambiental significativo debido al uso intensivo de recursos naturales, la emisión de gases de efecto invernadero y la producción de residuos. Además, esta ropa está hecha de materiales de baja calidad, lo que significa que se desgasta rápidamente y se convierte en un desperdicio.

 

La Procuradurías Federal del Consumidor elaboró un estudio de las tiendas que venden ropa de mala calidad, entre las que destacan: ZaraBershkaBestsellerBoohooC&ACharlotte RusseCotton OnEspiritFashion FoxesForever 21GapUniqlo y Victoria's Secret.

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