La Justicia chilena condenó el jueves a dos exfuncionarios de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) por su participación en crímenes de secuestro y tortura contra un trabajador de una compañía agrícola en 1973.
"El ministro en visita Álvaro Mesa condenó con costas al capitán del Ejército en retiro, Jorge del Río y al otrora carabinero (policía militarizado), Domingo Campos por sus responsabilidades en los delitos consumados de apremios ilegítimos y detención ilegal, en carácter de lesa humanidad, de Guido Venegas, ilícitos perpetrados en septiembre de 1973", informó el Poder Judicial a través de un comunicado.
El tribunal condenó a Del Río a una pena de cuatro años de presidio efectivo en su calidad de autor de los delitos, mientras que Campos deberá cumplir 60 días de reclusión, en calidad de cómplice.
El fallo estableció que Venegas trabajaba como ejecutivo en una empresa agrícola en Lautaro, en el sur de Chile, cuando fue secuestrado por militares y trasladado a una comisaría del sector. En el recinto, fue sometido a sesiones de interrogatorios y de torturas que incluyeron golpes de puños, patadas, golpes con bastones retráctiles, asfixia con bolsas plásticas y otras vejaciones.
Mientras era torturado, la víctima logró identificar a del Río y a Campos, a quienes conocía como vecinos del sector, información que sirvió a la Fiscalía para concretar la condena en contra de los exagentes.
A pesar de ser liberado, Venegas fue detenido unas doce veces más durante el régimen, lo que lo obligó a tener que exiliarse a Argentina para retornar a Chile recién en 1988.
El tribunal determinó que el delito cumple las condiciones de crimen de lesa humanidad y por tanto, no corresponde contar el plazo de prescripción, a pesar del tiempo transcurrido. Durante la dictadura de Pinochet, más de 28,000 personas fueron torturadas, 3,227 asesinadas y unas 200,000 partieron al exilio, según cifras oficiales.
