En próximos días entrará en funciones la nueva Central Camionera del Sur (CETRAM) que se ubicará en la calle 119 Poniente y Avenida Los Pinos, a unos metros de la Avenida 11 Sur de la Unidad Habitacional Agua Santa.
De acuerdo a lo anunciado por el gobernador del estado, Sergio Salomón Céspedes, esta nueva central de autobuses tendrá salidas a la Ciudad de México, Querétaro, Veracruz, Tabasco, Oaxaca, Hidalgo, Estado de México y Guerrero. Además, ofrecerá los mismos servicios de viajes que actualmente tiene la Central de Autobuses de Puebla (CAPU), ya que se quedó la concesión de la misma.
Pero, aunque la nueva central camionera no signifique una competencia directa con la CAPU a nivel operativo y directivo, lo que sí es una realidad es que cientos de comercios y todo lo que ello engloba se verán afectados en sus ingresos económicos.
Muchos de estos comerciantes que laboran en la informalidad llegaron desde hace 30 años o un poco más. Años en los que "lucharon" por conseguir un espacio donde trabajar y defenderse de aquellos que querían invadir su lugar y que, ahora, han manifestado a Imagen Poblana, que la afluencia de pasajeros disminuirá "de entrada un 10 %" y esto por supuesto se verá reflejado en sus ventas, con la apertura de la CETRAM.
La Organización Cristóbal Colón, con más de 300 vendedores ambulantes ubicados en los alrededores de la CAPU, ha defendido por años este espacio, incluso de la propia delincuencia y estafadores con el juego de "la bolita", cómo nos lo plática Miguel, quién se dedica a la venta de antojitos mexicanos.
Aseguró que fueron años en los que se enfrascaron con los propios delincuentes con la finalidad de mantener la zona como un lugar seguro y de esta forma no se afectaran sus comercios. Sin embargo, ahora con la inauguración de la nueva central del sur, dijo, que es un hecho que disminuirá la afluencia de personas y por consiguiente, las ventas.
Y es que aseguró que las ventas en los últimos meses no se han podido mantener positivamente, "entonces, si ya así nos bajan en ocasiones las ventas, con la nueva central, nos van a bajar más".
Por su parte, José Vega, encargado de Antojitos Torres, ubicado sobre el Bulevar Norte, a escasos metros de la CAPU, se mostró un poco optimista y dijo que "a lo mejor sí" podría presentarse una baja de clientela en su negocio.
"Ya se verá cuando la inauguren, ahorita está normal, pero ya después quien sabe", expresó.
Miguel Ángel, encargado del restaurante "El Chino", ubicado dentro de la central camionera, refirió "de cierta manera sí se va a ver afectada (la venta) un poco porque clientes pasajeros que venían de esa zon, van a tener como tal una opción más".
Aseguró que cuando se dan este tipo de situaciones el comercio se ve afectado de inicio en 10 % en sus ventas, "de ahí partimos y puede llegar a incrementarse, se mantiene o de plano, baja". Por ello, esperarán a que sea inaugurada para conocer la magnitud de la afectación.
Finalmente, Andrea, encargada de taquería "La Central", refirió que para evitar que su negocio sufra bajas en sus ventas, lo ideal es poner uno nuevo en la central de autobuses que será próximamente inaugurada.
"Probablemente sí nos afecte, pero no en un 100 %, a final de cuentas, si se abre una nueva sucursal (central) nosotros tendríamos que ver la opción de abrir otra sucursal también nosotros para que esa afectación sea lo menos impactante para el comercio".
Aseguró que sí habrá un descenso en la afluencia de pasajeros, aunque este no será muy significativo. "La gente que vive en Puebla, busca lo más cercano a su domicilio, la del sur irá a la central del sur y la del norte a la CAPU, pero la gente que va a querer hacer transbordos, evidentemente va a llegar acá, porque aquí se manejan los transbordos".
Al final, como dijeron muchos comerciantes a este medio, que prefirieron el anonimato y coincidieron en señalar que sí tendrán afectaciones, pero esperaran que se inaugure la CETRAM para saber de qué tamaño será el impacto en sus ventas.
CAPU: un poco de historia
Durante el periodo de mandato del gobernador Alfredo Toxqui Fernández de Lara, se decide crear en 1979 la CAPU como una respuesta a la expansión de la red vial y al incremento de transporte público foráneo y suburbano.
Sin embargo, fue hasta 1983 que se inicia la construcción en 13.7 hectáreas de 47,800 metros cuadrados de edificación y 5,000 de bandas de rodamiento, avenidas internas, estacionamientos y áreas verdes, en un tiempo de cinco años de construcción.
El presidente de la República de aquel entonces, Miguel de la Madrid Hurtado, y el gobernador de Puebla en turno, Mariano Piña Olaya, acompañados de dueños y directivos de las empresas socias, inauguraron el 5 de mayo de 1988 la CAPU.
En 1990 se inició el proyecto de comercialización de locales para la venta de comida, artículos para pasajeros y servicios financieros y, durante la primera década de los años 2000, se construye el paso a desnivel del Boulevard Norte y se habilitan los túneles de acceso a la bahía de servicio urbano.
Con el paso de los años, la CAPU se convirtió en la terminal más grande de México y Latinoamérica, en la que las mejores líneas de autobuses brindan un servicio de calidad, además de contar con espacios comerciales con las que se atiende a pasajeros y usuarios en general.
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