En un medio de chismes de la farándula, se ha comentado el fallecimiento del productor musical Sergio Andrade, quien desde hace años se mantuvo lejos del ojo público por las acusaciones de corrupción de menores. Las versiones sobre Andrade varían, pues algunos afirman que murió, pero otros señalan que está grave; otros más afirman que Andrade está fingiendo su deceso para evadir a la justicia de Estados Unidos.
En Wikipedia se dijo que Andrade perdió la vida el 21 de junio en Barcelona, España, aunque luego se cambió ese dato, pero algunos medios aseguran que en realidad está delicado de salud en Cancún, Quintana Roo, donde incluso lo dializan y visita un hospital. Esto pasa a medida que continúan las investigaciones en su contra por el caso del clan Trevi-Andrade.
El pasado que une a Sergio Andrade con la cantante Gloria Trevi y Mari Boquitas todavía lo persigue, pues aún es acusado de corrupción de menores, rapto y violación agravada de menores en Estados Unidos. Se cree que la supuesta muerte de Andrade podría ser una estrategia para no rendir cuentas en el país del norte, esto ante las denuncias que yacen en su contra desde hace tiempo.
La oscura historia de Sergio Andrade como productor musical
En la década de los 80, Sergio Andrade era uno de los productores musicales con más reconocimiento y prestigio del momento, por lo que quienes aspiraban a ser artistas anhelaban trabajar con él. Gracias a esto, Andrade reclutaba a jóvenes que querían ser cantantes con la promesa de llevarlas al estrellato, aunque en medio había prácticas de abuso y maltrato en contra de las menores.
Su primera esposa fue Guadalupe Castilla, con quien se casó en 1981 y luego salió a relatar el infierno que vivía a su lado, con abusos, humillaciones, violencia sexual y física; fue de las primeras en denunciarlo por corrupción de menores en 1997. La segunda esposa de Andrade fue María Raquenel Portillo “Mary Boquitas”, parte de uno de sus proyectos musicales.
Para 1988 conoció a Aline Hernández, de sólo 13 años y con quien se terminó por casar en 1990, a sus 15 años. Al igual que Guadalupe Castilla, expuso todos los abusos y maltratos que ejerció Andrade, en su libro “La gloria por el infierno”. Ella también develó la forma en que Andrade usaba su fama y la de Gloria Trevi para enganchar a jovencitas y abusar sexualmente de ellas.
Respecto a Gloria Trevi, la conoció en 1982 en el programa “La Doble de Chispita”, en el que buscaban a la doble de Lucero; ella tenía 14 años. En 1984 sacó el proyecto “Boquitas pintadas”, donde estaban Pilar Romero, Mónica Murr, Claudia Rosas y Mary Boquitas. Así se empezó a gestar el clan Trevi-Andrade, en el que se cometieron la mayoría de los delitos que hoy se les imputan.
Gracias a la fama de Gloria Trevi, Sergio Andrade atraía a mujeres jóvenes, muchas de ellas menores de edad, con la mentira de llevarlas al estrellato como lo hizo con Trevi. No obstante, lo usual es que simplemente se llevara a las menores a una supuesta academia, a veces incluso sacándolas del país para que sus familias no les siguieran la pista ni se enteraran de los abusos.
El escándalo estalló en 1999 cuando la madre de Karina Yapor denunció a Sergio Andrade y Gloria Trevi por secuestrar a su hija, aunado a los delitos de corrupción de menores y violación. A ella la llevaron a su supuesta academia, pero después de un tiempo la familia le perdió la pista tras un viaje a España. En adelante, Trevi y Andrade se convirtieron en prófugos por un año, terminando su huida en Brasil.
Parte de los abusos que cometía el productor eran violación de las menores a las que les prometía la fama, incluso con amenazas de por medio contra las familias de quienes se resistieran. Para esto, también se valía de la manipulación que ejercía Gloria Trevi, según lo relataron las víctimas, toda vez que fingía ser su amiga para incitarlas a relacionarse con Andrade.
Las jóvenes a las que supuestamente reclutaban para entrenar como artistas, inicialmente eran llevadas a un cuarto en la Ciudad de México donde las mantenían encerradas y sólo las llevaban a sus “prácticas” y las alimentaban.
Derivado de los constantes abusos sexuales, era usual que las víctimas terminaran embarazadas, por lo que Sergio Andrade las obligaba a abortar. Mary Boquitas dijo que fuer llevada a Estados Unidos para interrumpir su embarazo, cuando era menor de edad. A Trevi, por su parte, también la hizo abortar, pero igualmente perdió una hija en medio de las persecución que había contra ellos en Brasil.
Algunas víctimas del clan Trevi-Andrade fueron Sonia Ríos, Karina Yapor, Liliana Regueiro, Tamara Zúñiga, Wendy Costelo, además de las hermanas Karola, Katia y Karla de la Cuesta. Las últimas dos eran dos hermanas provenientes de Puebla, quienes llegaron al grupo después de conocer a Gloria Trevi en una convivencia con fans, y fue ella la que las convenció de unirse a su “academia” para ser coristas.
A ellas las rescataron del clan en Brasil, en el año 2000, cuando estalló el escándalo en torno al productor y la cantante. Por su parte, Karla y Karola regresaron a Puebla con dos hijos, en ese entonces de siete y cuatro meses de edad, mientras que Katia resultó imputada por cargos de rapto y violación en contra de Karina Yapor, que en ese momento era menor de edad; estuvo 11 meses en la cárcel hasta que la dejaron en libertad.
Al final, a Sergio Andrade lo detuvieron en Brasil en el 2000, para luego ser llevado a México, donde lo condenaron a siete años y diez meses de prisión, mientras que a Gloria Trevi y Mary Boquitas las mantuvieron presas en Brasil y luego las condenaron a cuatro años y ocho meses de cárcel, ya en México.
Ahora con las denuncias más recientes que hay sobre Gloria Trevi, Sergio Andrade y María Raquenel Portillo, los tres enfrentan los mismos cargos de violación y corrupción de menores en Estados Unidos. Gloria Trevi mantiene la versión de que ella era víctima y no victimaria, pero en el caso de Andrade poco se sabe de su vida personal desde el 2007 cuando quedó en libertad, aunado al hecho de que ahora se habla de la posibilidad de su muerte.