Gerardo Fernández Noroña, el “compañero” incómodo en la 4T

Gerardo Fernández Noroña, el “compañero” incómodo en la 4T

Foto: Enfoque

Dentro de la Cuarta Transformación hay personas que se han caracterizado por ser polémicas, incluido el diputado federal del Partido del Trabajo (PT), Gerardo Fernández Noroña. Hoy, el legislador de izquierda da de qué hablar debido a que, según él, no se le toma en cuenta para los roles de mayor relevancia en el próximo gobierno federal o en la Legislatura que iniciará.

 

Por un lado, el petista se quejó de que la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, no lo haya considerado para integrar su gabinete de gobierno que iniciará el 1 de octubre. Al mismo tiempo, criticó que no se le tomó en cuenta para la coordinación de la bancada de senadores de Morena, esto a pesar de que fue el tercero en la encuesta de candidatos a la presidencia que resultó en la selección de Sheinbaum.

 

 

Como en este episodio, Noroña ha sido uno de los perfiles más polémicos e incómodos de la 4T, ya que ha criticado y señalado sin miramientos a sus compañeros de movimiento e incluso al propio presidente.

 

La adhesión de Fernández Noroña a la 4T ha sido desde siempre controversial, pero a pesar de esto, logró que lo consideraran dentro de las seis “corcholatas” presidenciales como representante del PT. Para esto, incluso cuestionó al presidente Andrés Manuel López Obrador, pues hace más de un año el mandatario ni siquiera lo contemplaba como una posibilidad para la candidatura.

 

En mayo del 2023, AMLO hizo un listado de quienes podrían sucederlo en el poder, incluyendo a Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López o Ricardo Monreal, dejando fuera a Fernández Noroña. Esto molestó al petista, quién dijo que el presidente se parecía al INE, aunque “el INE por lo menos te registraba aunque te hiciera chingaderas”, aunque luego aceptó las reglas de la contienda.

 

El presidente no ha sido el único al que Noroña criticó en este proceso, ya que también acusó a Marcelo Ebrard de querer dividir cuando los resultados de las encuestas no le favorecían. También se fue sobre las otras “corcholatas” por sus excesivos gastos en la interna, además de que insinuó que se estaba favoreciendo a la hoy presidenta electa, Claudia Sheinbaum.

 

Por si fuera poco, en su papel de legislador también ha estado rodeado de controversias, toda vez que se caracteriza por ser uno de los perfiles más combativos de su partido y alianza. En redes sociales, por ejemplo, ha discutido con políticos de la oposición como la senadora Lily Téllez, a quien una vez llamó fascista en una pelea en X.

 

 

No conforme con los acontecimientos que protagoniza en el plano nacional, también se pronuncia sobre asuntos internacionales, tales como la invasión a la embajada mexicana en Ecuador. En abril de este año, el legislador denunció a Daniel Noboa, presidente de Ecuador, ante la Fiscalía General de la República (FGR) por la invasión al suelo mexicano, pidiendo su detención y extradición a México.

 

Sin embargo, no todos sus momentos han sido favorables, pues a él también lo denunciaron en su momento por presuntamente ejercer violencia política de género contra las mujeres. En 2019 la diputada del PAN, Adriana Dávila consideró que sus comentarios en el Congreso de Tlaxcala fueron violencia de género, por lo que en 2020 se acreditó una infracción en su contra, algo que él interpretó como un intento de sacarlo de la política.

 

Ahora, Fernández Noroña reclama que no se cumplen los acuerdos de la contienda interna de la 4T, ya que fue el mejor posicionado detrás de Sheinbaum y Ebrard. Alega que le corresponde la coordinación de senadores, cargo que presuntamente iría para Adán Augusto López, mientras que a Ricardo Monreal le tocaría la coordinación de los diputados federales.

 

 

Ahora, ante esta exclusión, el petista amenaza con dejar su senaduría plurinominal porque no se le da el rol que él considera merecer tras ser el tercer lugar de las encuestas. Ante esto, la futura mandataria federal afirmó que hablará con Fernández Noroña a fin de apaciguar el tema y conservar a uno de los perfiles más controvertidos e incómodos de la 4T.

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