Atrás quedó la “unidad”: así se rompieron las alianzas políticas después del 2 de junio

Atrás quedó la “unidad”: así se rompieron las alianzas políticas después del 2 de junio

Foto: Freepik

No han pasado ni dos semanas de las elecciones del 2 de junio y los diferentes bandos políticos ya muestran división, especialmente los que resultaron perdedores de la justa comicial. Y es que los políticos que antes se mostraban aliados y unidos, hoy están sacan a la luz los conflictos que se dieron durante el proceso electoral, o bien, inician una disputa por el control de los partidos.

 

A 12 días de la elección, la oposición empezó a romperse después de meses de mostrar una supuesta unidad entre tres partidos que por años fueron opuestos. Entre dudas del futuro de su alianza, reclamos a los liderazgos y discusiones entre los principales candidatos, hoy la oposición continúa dividiéndose desde adentro tras su apabullante derrota.

 

No obstante, en otros bandos políticos el panorama es similar, ya que en los otros frentes también hay división entre quienes parecían aliados, contrastando con la unión de quienes se mostraban como rivales políticos.

 

Un ejemplo de lo anterior es lo ocurrido con la excandidata a la presidencia Xóchitl Gálvez Ruiz, quién ventiló en una entrevista para Reforma lo que ocurrió entre ella y Marko Cortés, dirigente nacional del PAN. Gálvez, reconociendo la derrota, felicitó a Sheinbaum la noche del 2 de junio sin consultar a Cortés, aunque este planeaba denunciar un supuesto fraude electoral.

 

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Xóchitl dijo a Grupo Reforma que lo anterior despertó la furia del líder panista, ya que no se enteró por la propia candidata, sino porque Sheinbaum hizo pública la felicitación en medios de comunicación. Marko Cortés fue a su habitación de hotel a gritarle “de manera innecesaria”, aunque no era la primera vez que ocurría, sino que fue la segunda ocasión en que le gritaba.

 

Lo anterior resultó en un enfrentamiento verbal, con Cortés recriminando a Gálvez por su autonomía en la decisión, pese a que por más de un año ambos estuvieron unidos impulsando un proyecto alternativo para el país. Aunado a esto, también se evidenció el poco apoyo que hubo por parte de los partidos a la campaña de Gálvez, especialmente con el dinero que se les otorgó.

 

Max Cortázar, el vocero oficial de Xóchitl, también se fue en contra de Marko Cortés, ya que declaró que los partidos políticos, especialmente el PAN, le dieron poco dinero a la campaña presidencial. Además del nulo financiamiento a Gálvez, también lo criticó por la forma en que trató a la entonces candidata cuando decidió reconocer la victoria de Claudia Sheinbaum.

 

 

Por si fuera poco, la oposición también está en un momento de dudas sobre la continuidad de su alianza, ya que los resultados estuvieron por debajo de lo esperado. El PAN es el partido más fuerte en la alianza, mientras que el PRI está cada vez más debilitado y con menos votos, mientras que el PRD está en sus últimos minutos de vida tras no haber reunido ni el 3 % de la votación total.

 

Actualmente los dos partidos que se mantienen con vida empiezan a ser cuestionados por sus propios militantes, ya que piden una rápida renovación y la renuncia expedita de los dirigentes Marko Cortés y Alejandro Moreno del PRI.

 

En Puebla ocurre algo similar, ya que hoy en día hay varios grupos del PAN que se pelean las dirigencias del partido a nivel estatal y municipal en la capital. En la estatal, Rafael Micalco y Genoveva Huerta quieren volver a liderar el partido, mientras que Mario Riestra y Eduardo Rivera también aspiran al cargo. En la capital, Guadalupe Leal quiere la presidencia municipal del PAN en lugar de Jesús Zaldívar.

 

 

PAN, PRI y PRD no son los únicos institutos que han mostrado otra cara tras las elecciones. En Movimiento Ciudadano los diferentes liderazgos se han enfrentado por la forma en que se conduce el partido que pretende representar a la “nueva política”.

 

El aún gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, sigue poniendo bajo la lupa al dirigente nacional, Dante Delgado. El mandatario tapatío se ha mostrado en desacuerdo con el “fosfo fosfo”, la forma en que eligieron al candidato a la presidencia en medio de cervezas, y más reciente, los resultados que obtuvieron en las elecciones a los que consideró mediocres.

 

La política después de las elecciones revela la ruptura política y a veces la volatilidad de las relaciones entre los políticos. Ejemplos como el de Xóchitl Gálvez y Marko Cortés son la muestra más clara de cómo las diferencias y las estratégicas pueden salir a la luz tras una jornada electoral en la que los resultados no fueron ni medianamente lo esperado.

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