En un remoto pueblo cerca de Palermo, Italia, está la que se presume como la casa más pequeña del mundo. La localidad lleva el nombre de Petralia Sottana y alberga esta peculiar estructura conocida como la “Casa del Dispetto” o Casa del Rencor.
Según el portal Idealistas, la historia detrás de esta diminuta casa se remonta a un conflicto entre vecinos durante la década de 1950. La historia dice que a un residente local le negaron el permiso para elevar su casa en altura, lo que desencadenó una disputa con su vecino. Como respuesta, decidió construir una casa de apenas un metro de ancho con el único propósito de obstruir la vista al vecino con el que discutía.
La peculiaridad está en que, si bien necesitaba el permiso de dicho vecino para elevar su casa en altura, para construir una casa entre las propiedades existentes únicamente tenía que respetar la distancia mínima entre ambos edificios, resultando en esta construcción.
La casa tiene una anchura máxima de poco más de un metro y solo puede albergar a dos personas, pero no está diseñada para ser habitada. Conocida en dialecto siciliano como “Casa du Carrivu”, esta construcción continúa siendo una atracción turística para todos los visitantes.