En un encuentro en la Casa Blanca donde participó la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, junto con representantes de la Oficina de Prevención de la Violencia con Armas (OGVP, por sus siglas en inglés), se celebró la contribución crucial de los líderes de Intervención de violencia comunitaria de todo el país. Asimismo, el Gobierno estadounidense reconoció los esfuerzos en la reducción y prevención de la violencia, como también el rol vital en salvar vidas, todo enmarcado dentro del ambicioso "Plan América Segura" del presidente Joe Biden.
Entre los momentos destacados del encuentro, se reconoció a la primera cohorte graduada de la Academia de Liderazgo en Intervención de Violencia Comunitaria del Laboratorio de Crimen de la Universidad de Chicago (CVILA). Este programa busca dotar a los líderes de intervención comunitaria con habilidades y recursos esenciales para mejorar sus organizaciones y respaldar su misión de prevenir y reducir la violencia armada, especialmente en comunidades desproporcionadamente afectadas por las consecuencias directas e indirectas de la violencia armada.
Kamala Harris elogió la "brillantez" de esta clase inaugural, destacando su capacidad para vislumbrar futuros positivos más allá de las limitaciones actuales y concretarlos de manera que puedan replicarse a lo largo de Estados Unidos. "Felicito a todos los presentes y a los graduados por todo lo que han invertido en esto y por todo lo que hacen por sus comunidades", afirmó.
La ceremonia culminó una semana de actividades organizadas por la OGVP, que comenzó con un mensaje del Presidente a los interesados en la prevención de la violencia armada a nivel nacional. Durante la semana, se llevaron a cabo eventos virtuales y presenciales, incluyendo reuniones sobre el impacto único de la violencia armada en la comunidad negra y sesiones informativas sobre programas de seguridad comunitaria disponibles a través de los departamentos de trabajo, educación y justicia.
Asimismo, la administración Joe Biden realizó inversiones significativas en la intervención de violencia comunitaria y otras soluciones probadas para acabar con la epidemia de violencia armada. Gracias al Plan de Rescate Estadounidense (ARP) y la ley bipartidista de Comunidades Más Seguras (BSCA), proporcionaron más de 15 mil millones de dólares para prevenir el crimen y promover la seguridad pública, incluyendo programas de intervención en violencia comunitaria y respondedores de crisis.
Los datos del FBI de 2023 reflejan una notable disminución en el crimen, incluyendo una de las mayores caídas anuales en homicidios jamás registradas, indicó un comunicado de la Casa Blanca. Esto contrasta con el incremento récord de asesinatos observado en 2020, el último año de la administración de Donald Trump.
Asimismo, México acusa que el 70% de las armas usadas por el crimen organizado provienen de Estados Unidos. Por su parte, China también condenó a Estados Unidos por el comercio de armas con Taiwan y Ucrania.
Por su parte, Gobierno estadounidense insta al Congreso y propietarios de armas que apoyan medidas de seguridad con armas de fuego más sensatas, incluyendo verificaciones de antecedentes universales, la prohibición de armas de asalto y cargadores de alta capacidad, y la promulgación de una ley nacional de bandera roja.
Este reconocimiento de la Casa Blanca a los líderes de intervención de violencia comunitaria no solo celebra los logros hasta la fecha, sino que también refuerza la importancia crítica de seguir avanzando en el camino un país seguro en equilibrio con el uso de armas por parte de la población. (NotiPress)