Presión social sigue causando muertes en la industria del entretenimiento surcoreana

Recientemente, la muerte del talentoso actor Lee Sun-kyun, conocido por su papel en la película ganadora del Oscar “Parásitos”, causó consternación mundial. Sin embargo, el actor dejó una nota en la que expresaba sentirse abrumado por la investigación en curso sobre su supuesto consumo de drogas, una acusación que fue el epicentro de críticas negativas y controversias.

Lee Sun-kyun estaba siendo investigado por presunto consumo de marihuana. La policía le había hecho tres interrogatorios, siendo el más reciente el fin de semana, donde estuvo 19 horas hablando y alegó que había sido engañado por una mujer en la residencia de una hostess en Seúl para consumir la sustancia. A pesar de dar negativo en las pruebas de drogas, la dureza con la que el departamento de policía de Incheon manejó su caso, además de la falta de respeto a sus derechos legales y la presión mediática, llevó al suicidio del actor.

La noticia también resaltó la intensa presión social que enfrentan los artistas en Corea del Sur, donde se espera que mantengan comportamientos ejemplares. La tragedia de Lee Sun-kyun pone de manifiesto las problemáticas sicológicas y sociales a los que se enfrentan los artistas en un entorno donde las acusaciones pueden tener consecuencias devastadoras para sus carreras y bienestar emocional.

Expertos señalaron que las muertes por suicidio son multifactoriales y requieren un enfoque integral para abordar los factores sicológicos, biológicos y sociales involucrados. La sociedad surcoreana tendrá que abordar estas cuestiones de manera compasiva y reflexiva, reconociendo la importancia de la salud mental y la necesidad de un cambio cultural en la percepción y tratamiento de las figuras públicas.