Viajar sin mascotas: así pueden estar cuidadas y seguras mientras no estás

Las vacaciones de diciembre son una época para disfrutar con la familia y los amigos, pero también pueden ser un problema para los dueños de mascotas que no pueden viajar con ellas.

Existen varias opciones para cuidar a las mascotas en vacaciones, dependiendo del tipo de animal, el tiempo que estaremos ausentes y el presupuesto que tengamos.

A continuación en Imagen Poblana te contamos sobre algunas de las opciones más comunes para que tu mascota pueda estar segura en tu ausencia.

Dejarlas en casa con alguien de confianza

Esta es una buena alternativa si tenemos un familiar, un amigo o un vecino que pueda visitar a nuestra mascota al menos una vez al día, darle de comer, cambiarle el agua, limpiar su espacio y jugar con ella.

Así, el animal se sentirá más tranquilo al estar en su entorno habitual y con una persona conocida. Sin embargo, hay que asegurarse de que la persona que se encargue de nuestra mascota sea responsable, cariñosa y tenga experiencia con animales.

Llevarlas a una guardería o residencia

Otra opción es llevar a nuestra mascota a un lugar especializado donde le brinden atención, alimentación, higiene y entretenimiento.

Hay muchas guarderías y residencias para mascotas que ofrecen estos servicios, con diferentes precios y calidades.

Lo importante es visitar el lugar antes de contratarlo, verificar las condiciones de higiene, seguridad y espacio, conocer al personal que se ocupará de nuestra mascota y pedir referencias de otros clientes.

También hay que informar al establecimiento sobre las características, necesidades y hábitos de nuestra mascota, así como sobre su estado de salud y vacunación.

Contratar a un cuidador profesional

Una tercera alternativa es contratar a una persona que se dedique a cuidar mascotas a domicilio, ya sea en nuestra casa o en la suya.

Esta opción puede ser más cómoda y económica que llevar a nuestra mascota a una guardería o residencia, pero también requiere de una mayor confianza y comunicación con el cuidador.

Hay que asegurarse de que el cuidador tenga experiencia, referencias y certificados que avalen su trabajo, así como de que se adapte a las necesidades y rutinas de nuestra mascota.

También hay que dejarle un número de contacto de emergencia y el de nuestro veterinario de confianza.

Hacer más afable la ausencia

Independientemente de cual opción de las anteriores elijas, existen otras recomendaciones para hacer menos dramática la distancia.

Una de ellas es no cambiar su alimentación ni su horario de comidas, ya que esto puede causarle estrés y problemas digestivos.

También se recomienda dejarles sus juguetes, mantas y objetos favoritos, para que se sienta acompañado y entretenido.

Otra recomendación es no despedirnos de forma dramática ni alargar la despedida, ya que esto puede generarle ansiedad y tristeza. Lo mejor es actuar con normalidad y transmitirle seguridad y confianza.

Mantener el contacto con la persona que se encargue de nuestra mascota, para saber cómo está y si necesita algo.

Algo que debes tener presente es que, al regresar, debes darle mucho cariño y atención, pero sin sobreprotegerlo ni regañarlo, pues hay que respetar su espacio y su ritmo, y retomar la rutina poco a poco.