“Antiflu-Des, arcaico e inútil”: profesional de la salud

La polémica en redes sociales ayer giró en torno al uso de “Antiflu-Des”, un fármaco que se usa para tratar los resfriados comunes, pero que fue “cancelado” debido a sus efectos adversos y lo anticuado que se volvió como antiviral. La persona que demostró su otra cara fue el doctor Diego Romanfaur, quien llamó a no comprar más dicho medicamento por los riesgos a la salud que supone.

En entrevista para Imagen Poblana, el doctor Gerardo Gómez Reyes comentó que, en efecto, el Antiflu-Des ya es un medicamento arcaico al momento de tratar el virus de la gripe o sus similares. Sobre el hecho de que todavía hay personas que lo consumen, nuestro entrevistado acotó que esto se debe a la falta de regulación y la tradición que se ha hecho en torno a este fármaco.

Gerardo Gómez señaló que el Antiflu-Des consta de tres componentes principales, uno de ellos un antiviral, la amantadina, que desde hace mucho está en desuso porque, en primer lugar, ha perdido efectividad, y en segundo, porque en la actualidad hay muchos mejores. Los otros son un antihistamínico, la clorfenamina, que ayuda con el exceso de flujo nasal y el paracetamol, que puede aliviar los síntomas de la gripe como la fiebre alta.

Acotó que gracias a esta fórmula de los tres compuestos, en otros momentos sirvió como un reemplazo mejorado de medicamentos como el “XL3”, “Tabcin” o el “Contact”, pero hoy se ha vuelto inútil.

Acerca de efectos adversos, nuestro entrevistado apuntó a que el único riesgo, aunque menor, está en la clorfenamina, pues a pesar de que su objetivo es aliviar la congestión, en algunos momentos puede hacer lo contrario. Descartó que haya consecuencias como alergias y un subsecuente shock anafiláctico, ya que es muy raro que haya personas alérgicas al antiviral o al paracetamol.

A su modo de verlo, el hecho de que todavía esté en circulación y haya tanta demanda obedece a varios factores, desde la costumbre con el paso de los años de las familias enteras al consumirlo, hasta la falta de regulación por parte de la Secretaría de Salud para sacarlo del mercado; no obstante, otras aristas de esto son que es un medicamento económico y de aparentes efectos reales.

“El nombre Antiflu-Des es el de patente, pero se puede conseguir en similares en 30 o 50 pesos, y el de patente cuesta 150 o 200 pesos. Sí puede funcionar porque es para una gripe ‘simple’, pudiera funcionarles(...) por eso todavía hay quien se los toma y se los quita, es benéfico para ellos. En personas con otro tipo de virus, con otra agresividad no les sirve”, dijo.

Por último, refirió que otro factor que permite su consumo es que no requiere receta y en México la automedicación es algo sumamente común, caso contrario de otros países en los que la gente no puede comprar pastillas con tanta facilidad.

El doctor Gómez Reyes afirmó que el caso del Antiflu-Des no es el único, ya que hay otros medicamentos que, si bien no representan un riesgo per se para la salud, están en la misma situación de ser fórmulas viejas que simple y sencillamente no son efectivas para combatir las afecciones.

Ejemplo de esto es la “fenilefrina”, que todavía es empleada para alergias y congestión nasal, pero ya es antiquísimo y ha perdido efectividad. De igual forma está el “ampigrin”, otro que se usa para infecciones respiratorias y afecciones por virus de la gripe, con la diferencia de que este incluye ampicilina, un antibiótico.

El especialista explicó que consumirlos no es dañino en sí ni los hace más resistentes a futuro, sino que el mayor problema es que son inútiles como un tratamiento real. Dado que fueron diseñados para atacar virus o bacterias de hace muchos años, su uso contra los patógenos más nuevos y que han desarrollado resistencia contra los medicamentos no tiene mayor impacto en el organismo.

“En cuanto a que crean más resistencia, no, definitivamente lo que pasa es que no les hace, no sirve porque ya estamos con otros virus, entonces, el Antiflu-Des es como si tomaras una aspirina, no te va a servir”, finalizó.