Este año fue particularmente complicado para el Universo Cinematográfico de Marvel (UCM), marcado por una serie de reveses que pusieron en duda su dominio en Hollywood. Tras un inicio tibio con la recepción de “Ant-Man and the Wasp: Quantumania”, la compañía enfrentó la salida de Victoria Alonso del departamento de efectos visuales, el proceso penal de Jonathan Majors y el revés económico de la serie “Invasión Secreta”. Sin embargo, la situación se agravó con el estreno de “The Marvels”, que registró la peor apertura de fin de semana en la historia del UCM.
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La respuesta de la audiencia del UCM fue variada, pero un reportaje de IndieWire encendió el debate sobre el perfil demográfico de los seguidores de las películas de Marvel, pues parece que la generación Z no sigue la franquicia tan de cerca como los millennials, aunque hay excepciones como Matt Ramos, un joven de 22 años, quien señala que existe una base de fans de entre 16 a 24 años, pero admite que la saga sufrió una saturación de contenido y una amplia dispersión narrativa.
La generación Z descubrió el UCM en su punto más alto entre 2017 y 2019 con éxito como “Black Panther” y “Avengers: Endgame”, y ahora parece estar desconectada de las entregas más recientes, como se refleja en la baja proporción de espectadores jóvenes para “The Marvels”. Lo que plantea un nuevo desafío para Marvel, quien intenta rejuvenecer su audiencia con nuevos personajes y adaptaciones de contenido pensadas para supuestamente resonar entre la audiencia más joven.
El futuro del UCM y su capacidad para mantener el interés de la audiencia joven, especialmente hombres de entre 18 y 24 años, es incierto. La clave podría estar en cómo Marvel Studios adapta y presenta sus futuros proyectos para atraer a una nueva generación de espectadores, manteniendo la relevancia y el éxito de sus producciones entre los millennials.
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