Luego de que Arturo Zaldívar renunció a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), le corresponde al presidente Andrés Manuel López Obrador presentar la terna de la cual saldrá la persona que supla a Zaldívar. El mandatario presentó a las tres personas que podrían ser parte del máximo tribunal de justicia, pero se evidenció que pretendía colocar a personas cercanas a él.
La terna que envió el jefe del Ejecutivo se conforma por tres mujeres: María Estela Ríos González, Bertha María Alcalde Luján y Lenia Batres Guadarrama. Los nombres y apellidos de las tres finalistas son conocidos porque llevan tiempo cerca de la 4T y han laborado en la administración, o bien, se les ha propuesto para otros cargos.
Desde el 2021 y hasta la fecha, Estela Ríos se desempeña como consejera jurídica del presidente; por su parte, Bertha Alcalde es hermana de la actual secretaria de Gobernación (Segob), Luisa María Alcalde Luján, además de que labora como consejera jurídica de la Cofepris y este año también formó parte de las finalistas para ser presidenta del INE; mientras que Lenia Batres es la hermana del jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama y fue consejera jurídica de Claudia Sheinbaum cuando fue alcaldesa de Tlalpan.
Todas son cercanas al presidente, han trabajado en su administración o, como ya se vio, son familia directa de alguien cercano al mandatario; sin embargo, esta no sería la primera vez que se dan casos de nepotismo en la administración de AMLO, ya que en estos cinco años múltiples familiares o amigos del presidente o de sus secretarios de estado se han visto beneficiados con algún puesto.
Se considera nepotismo a toda preferencia que se le da a una persona cuya relación es de amistad, lazo familiar o cercanía con un trabajador público, para llegar a otro cargo público. Aunque el presidente criticaba el nepotismo en el tiempo que fungió como opositor, en su administración no han estado exentos de esta práctica.
Otro caso que tuvo atención en su momento también estuvo relacionado con la titular de Segob, Luisa Alcalde, quien en su paso por la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) favoreció al menos a siete familiares para entrar a puestos de la administración federal o en Morena. En 2020 se dio a conocer que su hermana, Bertha Alcalde, entró como jefa de oficina de la Secretaría de Seguridad Ciudadana. Lo mismo sucedió con su madre, Bertha Luján, quien ese año se convirtió en presidenta del Consejo Nacional de Morena.
Otras personas favorecidas fueron su prima Karina Luján Luján en la Secretaría de la Función Pública, quién tuvo el puesto de directora de asuntos penales; Tania Yiscareño ingresó al DIF nacional como jefa de departamento; Oscar Sandoval Salas, esposo de Tania, entró directamente a la STPS como jefe de evaluación. Las últimas dos fueron las hermanas de Oscar, Daniela y Gloria Sandoval Salas, quienes tuvieron puestos en el Servicio de Administración y Enajenación de Bienes y en la Agencia Mexicana de Cooperación para el Desarrollo respectivamente.
Hasta hace poco Alejandro Encinas era subsecretario de Derechos Humanos de la Segob y por años ha sido uno de los perfiles más fieles a López Obrador. Su hijo, Alejandro Encinas Nájera, ha tenido varios puestos en la administración, primero como titular de la Unidad Asuntos Internacionales de la STPS, pero ahora se desarrolla como subsecretario de Comercio Exterior en la Secretaría de Economía.
Otro funcionario al que se ha señalado de incurrir en esta práctica es el director de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett. Desde inicio de la administración su sobrino fue nombrado el superdelegado en Puebla, se trata de Rodrigo Abdala Dartigues, quien hasta hace poco fue uno de los aspirantes a coordinar la 4T en Puebla.
Por otra parte, hay otra relación de padre e hijo que tuvieron un mayor auge en su carrera política a partir del 2018. El titular de la Secretaría de Turismo (Sectur) Miguel Torruco Marqués fue señalado de favorecer a su hijo, Miguel Torruco Garza, para llegar a la presidencia de la Comisión de Boxeo. A partir del 2021 Torruco Garza fue electo diputado federal y este año se sumó, sin éxito, como uno de los aspirantes a gobernar la CDMX bajo el ala de Morena.
La presencia del familiar de un político en otra dependencia de gobierno no constituye un delito en sí, pero esta práctica siempre ha sido criticada por los conflictos de interés que se pueden dar, además de que se hace a un lado el mérito de una persona para favorecer a otra que no ha demostrado las aptitudes para ocupar un cargo público.
