El 31 de octubre se celebra una de las festividades más esperadas del año, Halloween. Esa noche, niños y adultos con disfraces aterradores recorren las calles pronunciando la famosa frase “truco o trato” en busca de dulces. ¿Pero de dónde proviene esta tradición?
La historia de pedir dulces en Halloween parece tener raíces que se remontan al siglo XVI en Inglaterra. Ya que durante el Día de Todos los Santos, era común que las personas más desfavorecidas salieran a pedir comida o limosna.
Según National Geographic, se solía regalar a los niños pasteles con cruces a los que llamaban “pasteles de almas” a cambio de que recitaran oraciones, y con el tiempo la tradición fue adoptada por los más jóvenes.
Además, se dice que el “trato o truco” podría tener vínculos con celebraciones navideñas, insinuando que es una tradición más moderna de lo que se cree. Sin embargo, lo que es innegable es que esta costumbre tomó un gran auge en Estados Unidos después de la Segunda Guerra Mundial. En particular, a partir de la década de 1950, cuando el racionamiento de alimentos llegó a su fin, la tradición de “truco o trato” resurgió con mayor fuerza, consolidándose como uno de los pilares del Halloween moderno.
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