El futbolista Papu Gómez fue suspendido por dos años tras dar positivo en un control de antidopaje llevado a cabo en noviembre de 2022, cuando aún era jugador del Sevilla. Según información del medio Relevo, el jugador explicó que había tomado un jarabe de uno de sus hijos sin consultar previamente con los médicos del club, esto debido a “una mala noche” que había tenido. Dicha sustancia fue detectada en el control antidopaje como Terbutanol.
"Papú Gómez":
— ¿Por qué es Tendencia? (@porktendencia) October 20, 2023
Porque informan que el argentino dio positivo en un control antidoping previo al mundial de Qatar y podría recibir una sanción de dos años sin jugar. pic.twitter.com/jiAYnHlezy
Sin embargo, el hecho de no haber notificado al cuerpo médico del Sevilla sobre la sustancia consumida va en contra de las regulaciones establecidas. Y a pesar de haber trabajado para obtener un permiso que le permitió representar a la Selección en el Mundial, la sanción plantea incertidumbre en cuanto al futuro de su carrera.
Tanto Papu Gómez como el Sevilla tenían conocimiento de esta situación desde hace varios meses, cuando la UEFA les notificó sobre la posible infracción de las reglas antidopaje. Esta situación habría complicado la búsqueda de un nuevo equipo durante el verano europeo y finalmente llevó a la rescisión de su contrato con el Sevilla. Aunque Papu planeaba esperar hasta enero para regresar a Italia, finalmente firmó con el Monza, donde disputó solo dos partidos en octubre.
Este caso plantea varias interrogantes, como el por qué la FIFA permitió que Papu Gómez participara en el Mundial pese a tener conocimiento de la situación o por qué aún no se da a conocer la sustancia específica que ingirió, o aún más importante: ¿Por qué la UEFA publica los resultados un año después?, preguntas que se espera sean aclaradas en las próximas horas.