¿Por qué no tomamos agua del grifo?

¿Por qué no tomamos agua del grifo?

Foto: Enfoque

Mientras que en muchas ciudades de Estados Unidos es común que las personas beban agua directamente de su grifo, en la mayoría de los estados de México esto se vuelve casi imposible debido a la mala calidad del vital líquido.

 

La calidad del agua puede variar mucho de acuerdo con cada entidad, municipio y hasta colonia, por lo que en algunos lugares sí puede ser viable tomar agua directamente de la llave, pero en la mayoría, principalmente en zonas urbanas, esto se vuelve prácticamente imposible.

 

La mayoría de las colonias de la zona metropolitana de Puebla, que incluyen municipios como Cuautlancingo, Amozoc, Puebla, San Andrés y San Pedro Cholula, la calidad del agua no es la óptima para el consumo humano.

 

Esto provoca que la mayoría de los hogares se tenga que utilizar agua embotellada para poder beber o cocinar, por lo que en promedio cada habitante en nuestro país consume una aproximado de 274 litros de agua embotellada al año.

 

¿Por qué no se puede tomar el agua de la llave?

 

A diferencia de lo que ocurre con el sistema de tratamiento de agua en otros países, como en Estados Unidos, en México los lugares de donde se extrae la mayoría del agua potable son ricos en metales y el agua no recibe el mismo tratamiento que en otras partes.

 

Esto provoca que al momento de la extracción del agua y al ponerse en contacto con el aire se produzca un efecto de oxidación lo cual hace que el agua tome una tonalidad amarillenta y adopte un sabor ferroso, lo cual también puede derivar en un olor extraño.

 

Tomando en cuenta que el agua debe de ser incolora, inodora e insípida, podemos decir fácilmente que el agua que sale de los grifos en la mayoría de los lugares de nuestro país no es apta para el consumo humano.

 

De acuerdo con estudios hechos por instituciones como la Universidad Nacional Autónoma de México, se ha encontrado que la mayoría del agua que llega a través del servicio potable a nuestras casas está contaminada principalmente de hierro y manganeso.

 

Sin embargo, en otros estudios se han encontrado otro tipo de metales pesados como el boro, arsénico y plomo, lo cual puede ser altamente perjudicial para la salud de las personas.

 

¿Cuáles son los efectos en la salud?

 

Si por alguna razón una persona estuviera ingiriendo constantemente agua directamente del grifo que contuviera alguno de los metales arriba citados, eventualmente podría llegar a desarrollar algunas enfermedades 

 

Según la cantidad de metales que contenga el agua y la cantidad de este líquido que ingrese al cuerpo, la persona podría sufrir afectaciones en órganos como el hígado, los riñones, el estómago y eventualmente podría enfermarse de cáncer 

 

Además, el agua en los grifos puede llegar a contener otro tipo de contaminantes, adicionales a los metales pesados, pues se han encontrado variaciones en el pH y el llamado nitrógeno amoniacal, el cual se produce por desechos humanos o de animales.

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