La música siempre ha sido parte de nuestra vida cotidiana, pero en la era del streaming y las redes sociales, la industria musical experimentó diversos cambios que han sido notables. Según un estudio de Xataka, las canciones están disminuyendo en duración y los estribillos llegan más rápido que nunca, basado en los datos recopilados de la lista Top 100 de Billboard de seis décadas diferentes, los cuales revelan esta tendencia.
En la década de los 90, las canciones tenían una duración promedio de 4:40 minutos, pero en la actualidad, la duración promedio es de poco más de 3:30 minutos. Este cambio se atribuye principalmente a los hábitos de los nuevos consumidores, que están acostumbrados a contenido rápido y breve, como los clips cortos y las plataformas de streaming. De hecho, el algoritmo de Spotify premia las canciones que se escuchan en su totalidad, fomentando la producción de canciones cortas.
La influencia de TikTok en la industria también es notable, ya que muchos “descubrimientos musicales” ocurren a través de las canciones que se presentan en los videos cortos de esta plataforma, llevando a la creación de canciones que se adapten a este formato.
No obstante, las canciones también buscan atraer a un público que constantemente cambia de estímulo y cuenta con muchas alternativas disponibles si no se siente atraído por una canción en particular. Esta evolución refleja el deseo de mantener a los oyentes entretenidos en un mundo donde la atención es fugaz y las opciones son abundantes