¿Confías en lo que consumes dentro de los mercados?

Los mercados ambulantes, conocidos por algunos como tianguis, están en el ojo del huracán luego de que una investigación del Departamento de Biomedicina Molecular del Cinvestav del Instituto Politécnico Nacional (IPN) revelara que nueve de cada 10 quesos que se venden en los estos espacios de la Ciudad de México están contaminados con bacterias presentes en heces de humanos o animales. El tema ha causado revuelo en materia de sanidad, pues a pesar de existir una norma oficial para los productos lácteos, esta no es respetada.

Debido a la informalidad de este tipo de mercados, es complicado mantener una regulación de los productos que se ofertan, pero si hablamos de mercados establecidos tampoco encontramos muchas diferencias pues en estos sitios se suelen ver roedores, moscas y otro tipo de plagas que pueden perjudicar los alimentos e incluso la calidad de la comida preparada.

Por ello, acudimos a los mercados del Parral y 5 de Mayo para preguntarle a los poblanos cuál es su percepción sobre la higiene que presentan estos centros de comercio y si existe confianza en los productos que adquieren.

El mercado del Parral fue fundado en 1962 y desde esa fecha, es considerado uno de los mercados más longevos, aquí podemos encontrar familias que durante generaciones han acudido al inmueble para hacer sus compras.

Raúl, es la tercera generación de su familia en acudir a este mercado, quien califica de cumplir con los lineamientos de higiene, aunque acepta que puede haber ciertas plagas como ratones u otro tipo de insectos, señala que estas situaciones se presentan incluso en hospitales.

"Sí hay higiene. Donde yo compro siempre veo que la gente desde temprano está limpiando, en cualquier mercado hay ratones por el ambiente, pero si en los hospitales hay", declaró.

La percepción de limpieza es extensa, otros clientes con hasta 30 años visitando el inmueble señalan que locatarios han tratado de mantener el mercado en las mejores condiciones, bajo sus propias limitaciones, así como descartan haber tenido alguna enfermedad o repercusión por comer alimentos en mal estado.

Del lado del mercado 5 de mayo, la percepción es bastante similar, aunque este lugar es más amplio y cuenta con mayor demanda, los clientes consultados indican que locatarios con regularidad limpian y desinfectan sus espacios.

Los poblanos consultados también indicaron adquirir sus productos en locales ya conocidos, por tanto, se muestran seguros de hacer sus compras. Bajo este escenario, algunos locatarios explicaron a Imagen Poblana que cuentan con distribuidores los cuales se encargan de procesar y certificar alimentos como la carne, lácteos y otros derivados para no incurrir en infracciones a la salud.