La Asamblea General del Comité Paralímpico Internacional (IPC) rechazó la suspensión total del Comité Paralímpico Ruso (CPR) con 74 votos en contra, 65 a favor y 13 abstenciones.
El IPC, encabezado por el brasileño Andrew Parsons, publicó en las redes sociales los resultados de la votación que se llevó a cabo en Baréin.
La nota agrega que, tras un receso, la Asamblea General debatirá una propuesta sobre la suspensión parcial del CPR.
La organización había suspendido a los comités paralímpicos de Rusia y Bielorrusia en noviembre de 2022.
En ese entonces, el organismo argumentó que Rusia y Bielorrusia supuestamente no cumplían con sus obligaciones como miembros según los Estatutos del IPC.
Para aquella votación, el ente convocó una Asamblea General extraordinaria con solo 119 miembros en Alemania, cuyo Gobierno negó el visado a la delegación rusa interfiriendo de este modo en la actividad del IPC.
El CPR recurrió la decisión ante el tribunal del IPC y logró la anulación de la medida, lo que abre la puerta para la participación de sus deportistas en los Juegos Paralímpicos de París que se llevarán a cabo entre el 28 de agosto y el 8 de septiembre de 2024.
Desde Rusia llamaron al IPC a no politizar el deporte y remarcaron que "involucrar a los paralímpicos en las cuestiones políticas entre los países es bajo e indigno para el movimiento olímpico".
El 28 de febrero de 2022, el Comité Olímpico Internacional (COI) recomendó a las organizaciones deportivas internacionales prohibir a los deportistas rusos y bielorrusos participar en competiciones debido a la situación en Ucrania.
El CPI siguiendo las recomendaciones, suspendió a los atletas rusos y bielorrusos de los Juegos de Pekín, celebrados entre el 4 y el 13 de marzo de 2022.
Sin embargo, el 28 de marzo, el COI recomendó a las federaciones internacionales permitir a los atletas rusos y bielorrusos, que no apoyan la operación militar especial rusa en Ucrania y no están vinculados al Ejército ni a las fuerzas de seguridad, tomar parte en los eventos deportivos bajo bandera neutral, aunque sugirió no considerar a los equipos de Rusia y Bielorrusia para las competiciones internacionales.
Rusia, a su vez, declaró que la mayoría de los países miembros del COI avalan la vuelta de Rusia al deporte mundial y no se dejan llevar por un grupo de Estados que están dispuestos a todo, incluido el chantaje en forma del boicot de competiciones deportivas en perjuicio de atletas y espectadores.