¿Qué es la Ética Médica y cómo la aplican los profesionales de la salud?

¿Qué es la Ética Médica y cómo la aplican los profesionales de la salud?

Foto: Eduardo Sánchez, Freepik

La ética médica es el conjunto de valores y principios que se ocupa de promover y aplicar los principios morales que regulan la actividad de la medicina, tanto en la práctica clínica como en la investigación científica.

 

En este Día Mundial de la Ética, hablamos con Itzayana Maldonado Larios, coordinadora de la facultad de Enfermería en la Universidad de América Latina, e Ilda Cecilia Cuate Ramos, médico general de la UDAL, quienes nos explicaron con más detalle qué es y cómo se aplica la ética médica.

 

Para Itzayana, la importancia de la ética médica radica en que orienta la conducta de los profesionales de la salud hacia el respeto con los pacientes, por tanto, los objetivos de la ética médica son el proteger los derechos humanos, garantizar la calidad de la atención sanitaria, fomentar el desarrollo profesional y científico y contribuir al bienestar social.

 

La ética médica la podemos dividir en cuatro puntos principales: la beneficencia, la no maleficencia, la justicia y la autonomía de los pacientes que tratan, aunque también podemos agregar el cumplimiento de las normas legales y deontológicas que rigen la profesión. 

 

 

En entrevista, Cecilia Cuate nos explica que la no maleficencia, significa que cualquier acto médico que se lleve a cabo no causará ningún tipo de mal al paciente. Por otro lado, la beneficencia, se encarga de que cualquier acto consciente que se ponga en práctica con el paciente solo tenga resultados positivos con él.

 

El principio de justicia obliga a tratar a cada paciente como le corresponde, sin distinciones de clase o raza, todos tenemos derecho a la salud. Este principio está detrás del ideal de tener servicios de salud de óptima calidad y accesibles para toda la población de manera equitativa.

 

Finalmente, la autonomía engloba que el paciente tiene el derecho de decidir si quiere aceptar un tratamiento o no. Ilda nos explica que deben dar su consentimiento, y para ello se le debe explicar todo lo relacionado al tratamiento, efectos adversos, daños que puede generar, así como los beneficios, de una forma sencilla, sin terminología médica para que sea más comprensivo.

 

“Se llama autonomía porque el paciente decide y si no lo quiere aceptar, no se le debe obligar”, indica. 

 

Uno de los temas éticos de mayor relevancia en la medicina es el consentimiento informado, pues implica una comunicación efectiva entre el médico y el paciente, basada en el respeto mutuo y la confianza. El consentimiento informado debe ser voluntario, libre de presiones o coacciones, y puede ser revocado en cualquier momento permitiendo la participación activa del paciente en las decisiones sobre su salud.

 

Con base en todo esto, Itzayana hace un llamado a todo el personal médico, no solo de instituciones educativas, sino a organizaciones, hospitales públicos y privados a hacer un correcto ejercicio médico con apego a la ética, el cual que requiere una formación continua y una actualización constante ante los avances científicos y tecnológicos que plantean nuevos retos y dilemas.

Notas Relacionadas