La polémica por el uso de baños de personas transgénero: ¿Cuál es la solución?

La Cineteca Nacional y una mujer transgénero llamada Laura, provocaron polémica por el uso de los baños públicos para mujeres, generando comentarios tanto a favor como en contra de las personas transgénero. 

Lo primero que hay que señalar en este caso es que lo ocurrido en la Cineteca Nacional sí corresponde a un acto de discriminación, incluso así lo admitieron a través de un comunicado publicado en sus redes sociales. 

Siendo parte de la Secretaría de Cultura, la Cineteca Nacional admitió que se trató de un error cometido por el personal de seguridad privada que se encarga de vigilar el espacio, incluso dijeron haber ofrecido las disculpas correspondientes a la parte afectada. 

Del mismo modo dieron a conocer que se tomaron las medidas correspondientes para que todo el personal que labora en la Cineteca Nacional tome cursos de capacitación, sensibilización y profesionalización en materia de derechos humanos, derecho a la no discriminación y derecho a la igualdad de género. 

La polémica incendiaria  

La postura por parte de la Cineteca Nacional fue bien vista por algunos grupos, principalmente la comunidad transgénero; sin embargo, otros usuarios reprobaron esto, aparentemente por cuestiones ideológicas. 

En redes sociales se pueden ver varios comentarios en donde los usuarios apoyan la medida tomada por las dos guardias de seguridad que sacaron a Laura del baño de las mujeres, señalando que biológicamente "no tiene nada que hacer ahí". 

Otros usuarios con esta misma postura manifestaron que cualquier padre se sentiría preocupado de permitir que sus hijas entren al baño de mujeres y que adentro hallen a una persona transgénero. 

Unos comentarios más se tornaron ofensivos señalando que "un hombre disfrazado de mujer" no puede usar las mismas instalaciones sanitarias que las mujeres que cuentan con este género por asignación biológica. 

Del mismo modo se publicaron varios comentarios en los cuales la gente reprocha que se haya actuado así con una persona transgénero y más en un lugar que presume ser uno de los centros de cultura más importantes en el país, como lo es la Cineteca Nacional. 

¿Hay una solución a esto? 

Independientemente de los puntos de vista de cada una de las partes, el reconocer que se trató de un acto de discriminación lo cometido en contra de Laura, podemos señalar que las autoridades coinciden en que las mujeres transgénero pueden usar el sanitario para mujeres ya que es con el género que se autoidentifican. 

Más allá de su género biológico, una persona transgénero decide hacer esta transformación justamente porque no se siente identificada con el género biológico con el que nació, por lo que obligarlos a ir al baño de hombres o mujeres sólo porque así lo marca su ADN, sería un acto de discriminación. 

Aquí entra un problema cultural, ya que las personas que utilizan los sanitarios tendrán que acostumbrarse a que, eventualmente, un hombre transgénero o una mujer transgénero pueden entrar al sanitario que les parezca adecuado, siempre y cuando se mantenga el respeto hacia las otras personas. 

También es necesario recordar que los argumentos sobre la supuesta inseguridad son muy ambiguos, ya que se han documentado casos de hombres que son violados por otros hombres dentro de los sanitarios para varones, así como de mujeres que son atacadas por otras mujeres dentro de los sanitarios femeninos. 

Dicho lo anterior llegamos a otro punto que sería la implementación de los sanitarios neutros o tercer baño, el cual ya se ha aplicado en algunos espacios dentro de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), así como de otras instituciones de educación. 

Estos baños pueden ser utilizados por aquellas personas que así lo prefieran ya sea por comodidad o en busca de privacidad, evitando que pueda ocurrir algún tipo de agresión mientras se llega a la meta del proceso de civilización y cultura sobre el respeto la identidad de género.