El pasado 12 de septiembre en Jiutepec, Morelos, un perro pitbull atacó a un niño de 5 años dejándole heridas en rostro y cabeza, además de arrancarle parte del cuero cabelludo por lo que su estado de salud hoy es delicado. El acto ha levantado una discusión sobre la supuesta agresividad de esta raza y su interacción con los menores. Para conocer más del tema, consultamos con un médico veterinario especialista con experiencia en el campo, quien develó los mitos de esta mala fama que los ha acompañado durante mucho tiempo.
“El temperamento del pitbull es inestable e impredecible y en cualquier momento pueden atacar sin dar señal alguna”, es una de las frases que más se menciona cuando la gente habla de estos perros, pero contrario a las creencias populares, los pitbulls pueden ser animales muy cariñosos.
En entrevista, Armando Martínez, médico veterinario, nos indica que esta raza de caninos es popular en el uso de peleas por su resistencia al dolor, pero eso no los define como animales precisamente agresivos, todo depende del entorno en que se desarrollen.
El término “pitbull” tiene varias vertientes: american pitbull terrier, el american staffordshire terrier, entre otros. Todas estas razas de cierta forma tienen relación pues son parte de las mezclas que surgieron a partir de la domesticación, por tanto, la mayoría comparte ciertas características físicas y comportamiento, aunque son perros distintos.
En el siglo XIX en el Reino Unido, se criaban perros gladiadores que fueran capaces de enfrentar a especies más grandes, como osos o toros, en espectáculos salvajes y crueles conocidos como bull-baiting –hostigamiento de toros– o bear-baiting –hostigamiento de osos–. De estas prácticas surgen las razas que actualmente conocemos como pitbull, que se caracterizan por ser animales fuertes y atléticos.
En el caso de Morelos vimos a un perro Pitbull Terrier Americano que, de acuerdo con Armando, su cruza nació con la intención de ser niñeros protectores: “Al momento de la cruza, su propósito es que fueran perros protectores de la familia, perros niñeros, de hecho, así son catalogados”.
Armando nos indica que la crianza del pitbull es el verdadero factor que nos aqueja, pues una “mala” educación no siempre es consciente, ya que algunos perros pasan más tiempo en casa sin convivir con niños pequeños, por lo que suelen ser más impulsivos o con otras personas y son susceptibles a reaccionar de forma defensiva.
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Pero esto no pasa solo en esta raza, sino que se aplica para todos los perros, desde razas pequeñas hasta grandes ejemplares. En el mundo contamos con más de 300 razas de perros y ejemplares, como el Pastor Alemán, famoso por su imponente figura, pero también por ser cariñosos, leales y serviciales.
En caso de ser atacados por un perro de este calibre, se debe permanecer quieto y no correr. Si el animal ya te soltó debes evitar pelear y proceder a crear distancia para revisar la herida. Por otro lado, los pitbulls son animales que muerden y no sueltan, por lo tanto, si estamos prensados debemos evitar los movimientos bruscos pues podrían generar mayores lesiones.
También debemos evitar meter las manos en el hocico del perro pues podríamos provocar un bloqueo de mandíbula. Lo más recomendable es tomar de las patas traseras al pitbull para jalarlo y desestabilizarlo, esto provocará que te suelte por un instante. Emplear un tubo como palanca también puede funcionar, uno de madera muy delgado podría quebrarse y astillar tanto al animal como la herida.
Aunque no siempre podemos estar a salvo de sufrir una mordedura, en esos casos, Martínez nos indica los primeros pasos a seguir es revisar el estado de la mordida para saber si es leve, de ser así es posible hacer un lavado antes de dirigirse a una clínica, pero en caso de ser una mordedura más fuerte se debe acudir de manera inmediata al hospital.
También hay que tener presente el estado de salud del perro en cuestión. "Es muy importante saber si cuenta con todas sus vacunas, la que más nos impronta es la vacuna de la rabia”.
Así que, a menos que te dé rabia, bastará con darle un cuidado superficial y esperar a que sane.
