Un nuevo informe de Pew Research Center revela que aproximadamente el 32 % de los adultos estadounidenses tiene al menos un tatuaje, y aproximadamente el 22 % tiene múltiples tatuajes. Estos datos se basan en una encuesta aplicada a 8,480 adultos en julio de este año, lo que representa una muestra nacional.
En el informe resalta que es más común entre las mujeres que entre los hombres, con un 38 % de las mujeres encuestadas teniendo al menos un tatuaje, en comparación con el 28 % de los hombres. Además, los adultos más jóvenes muestran una mayor prevalencia de tatuajes, con un 41 % de las personas menores de 30 años, comparado con el 13 % de los mayores de 65 años.
Para la mayoría de las personas encuestadas, el principal motivo para tatuarse es “recordar u honrar a alguien o algo”, con un 69 % de las respuestas en esta categoría. El proceso de tatuarse, también conocido como arte corporal, implica la inyección de tinta de color en la segunda capa de la piel, la dermis, y casi siempre se hace sin anestesia, variando en nivel de dolor de leve a intenso.
El informe también señala los riesgos para la salud asociados con los tatuajes, que incluyen infecciones de la piel, reacciones alérgicas a los tintes y la formación de queloides, que son protuberancias en la piel causadas por un exceso de tejido cicatricial. La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) no aprueba directamente las tintas para tatuajes, pero supervisa estas sustancias, habiendo retirado del mercado 18 tintas en los últimos 20 años debido a la contaminación.
Sin embargo, la FDA ofrece algunos consejos sobre la seguridad de los tatuajes, que incluyen la recomendación de contactar a un profesional de la salud si se observa que el área del tatuaje no sana correctamente o si aparecen erupciones cerca del área.
El informe Pew también subraya que el 80 % de los estadounidenses, incluyendo aquellos con y sin tatuajes, creen que la sociedad actualmente acepta más a las personas con tatuajes en comparación con dos décadas atrás.
