Compras en línea: más vale malo conocido, que bueno por conocer

El comercio en línea tuvo un gran despunte durante la pandemia del covid-19, pues muchas personas comenzaron a adquirir cada vez más productos a través de las diferentes plataformas.

Pero a pesar de que hoy en día son múltiples las plataformas de comercio electrónico que se dicen seguras, algunas veces los mecanismos de seguridad pueden no ser suficientes.

Un ejemplo claro ocurrió el 21 de agosto cuando un hombre en León, Guanajuato, adquirió un teléfono celular a través de la plataforma Mercado Libre, pero cuando recibió su paquete no venía el aparato, sino una granada de fragmentación.

Esto ha llamado la atención, ya que justamente Mercado Libre es una de las plataformas que está considerada entre las más seguras, no solamente en México sino en varios de los países en donde ofrece sus servicios.

En el caso específico de México, encontramos que Mercado Libre y Amazon están a la cabeza de las plataformas de comercio electrónico con mayor número de clientes.

Sin embargo, hay algunas recomendaciones de seguridad que debes tener en cuenta al momento de una compra en línea, ya sea a través de esta u otras plataformas disponibles en nuestro país.

Reputación del vendedor

En el caso específico de Mercado Libre, encontramos que hay algunas recomendaciones de seguridad como puede ser revisar la reputación del vendedor.

La misma plataforma emite esta recomendación y sirve para tener un panorama sobre la seriedad que tendrá la transacción, pues cada vez que alguien vende o compra a través de esta plataforma, tiene que dejar una calificación que sirve para los futuros usuarios.

Los usuarios con mayor número de transacciones dan mayor seguridad al momento de una compra, pues los nuevos usuarios podrán ver qué tan eficientes son sus tiempos de entrega y la calidad de los productos.

Esto también permite saber que no han tenido problemas entregando productos que no son los que ofrecía o que simplemente no llega la mercancía comprada, previniendo casos de fraude.

A diferencia de Mercado Libre, el sistema de Amazon es un poco más cerrado y es la empresa la que en la mayoría de los casos está a cargo de las transacciones y son pocos los vendedores que son acreditados para hacer de forma directa el proceso de compra y venta.

Los usuarios de esta plataforma recomiendan siempre verificar si la transacción es directamente con Amazon o con algún tercero, situación que se indica en los detalles de la publicación del artículo que pretendes adquirir.

Si haces la transacción directamente con Amazon, puedes tener la garantía de que si algo no está bien con tu pedido o con la mercancía que solicitaste, tu proceso de reclamación será directamente con esa empresa.

Tanto en Amazon como en Mercado Libre, los datos personales de los vendedores o compradores están protegidos, por lo que estas empresas únicamente se encargan de abrir canales de comunicación verificados para los procesos de reclamación.

En algunos casos, los vendedores habilitan algún correo electrónico o incluso un número de WhatsApp que permite tener un intercambio de información más directo, lo cual también ayuda a los compradores para tener más seguridad al momento de su compra.

En la oferta de comercio en línea también encontramos otras tiendas que no tienen una matriz en México y se encargan principalmente de importar los productos provenientes de Asia o Estados Unidos, como Ali Express, eBay o Alibaba.

Generalmente, lo que ocurre con estas plataformas es que los tiempos de espera para recibir la mercancía tardan semanas o meses, generando incertidumbre en el comprador sobre si su producto será entregado o no.

Asimismo, como recomendación general, si tú deseas adquirir algún producto a través de internet, lo más recomendable siempre será recurrir a las tiendas oficiales o plataformas que ya cuentan con experiencia.

Siempre intenta adquirir productos con empresas o negocios que ya cuenten con una reputación demostrable y una forma de contacto ya verificada, de lo contrario puede ser víctima de algún fraude o que, como en el caso ya citado, recibas algo que no es lo que en realidad habías comprado.