Además de la pobreza en los resultados en el inicio de la Apertura 2023, el Puebla de la Franja enfrenta un problema importante a días de debutar en la Leagues Cup y es que sigue sin definir quién ocupará su última plaza de extranjero disponible.
La semana pasada surgió el rumor de la posibilidad de que el uruguayo Cristian Tabó regresar al Angelópolis ya que ha perdido mucho protagonismo con Cruz Azul y, ante la necesidad del técnico Eduardo Arce de tener un atacante por las bandas, el hombre de 29 años se convertía en el refuerzo perfecto.
Sin embargo, a pesar de la oferta que hicieron los camoteros, la negociación se ha enfriado ya que el charrúa no está del todo convencido de volver a la capital poblana sobre todo después de haber aparecido como titular el viernes pasado en el encuentro de los celestes ante Xolos de Tijuana.
Esto ha provocado que tanto el cuerpo técnico como la directiva poblana caigan en desesperación e incluso no descarten apostar su último espacio para un futbolista no formado en México con el también uruguayo Kevin Ramírez, quien ya es parte de la nómina, pero estaba separado de la institución al no ser considerado por Eduardo Arce.
Ramírez no hizo la pretemporada junto a sus compañeros y en los últimos días ha estado entrenando por su cuenta en un gimnasio privado de la ciudad, aunque en las últimas horas fue llamado al estadio Cuauhtémoc para continuar con su trabajo físico y ante la urgencia de sumar elementos se podría convertir en un elemento nuevo para la Leagues Cup en la que debutarán el domingo ante Minnesota United.