Con el fin de los cursos escolares a la vuelta de la esquina, varios negocios de diferentes giros comerciales se beneficiarán económicamente por el aumento de clientes para satisfacer todo lo relacionado con la graduación de un estudiante.
Salones sociales, tiendas de ropa, fotógrafos, tiendas de regalos y hasta restaurantes tendrán una buena racha debido a las graduaciones escolares, que van desde preescolar hasta preparatoria.
Uno de los ejemplos más claros son los negocios dedicados a la venta de ropa, pues si bien algunos estudiantes se graduarán con sus respectivos uniformes escolares, otros tendrán que comprar algún traje formal.
Tiendas de ropa prevén aumento de hasta el 80 %
En entrevista con Imagen Poblana, el encargado de uno de los negocios dedicados a la venta de trajes en el Centro Histórico afirma que la temporada de graduaciones representa un aumento en las ventas de hasta un 80 %.
El encargado explica que hay opciones para todos los presupuestos, además de una gran variedad de estilos y colores, ya que muchos padres de familia deciden comprar vestimenta que no sea utilizada solamente una vez.
Para ello, también se implementan descuentos especiales que incentiven la atracción de clientes, pues es un giro comercial que tiene una amplia competencia, porque son varios los establecimientos que tienen este tipo de oferta.
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Es así que podemos hallar que, con descuentos que van del 10 % al 20 %, una familia puede comprar un traje por 1,200 pesos, siempre y cuando el niño que lo vaya utilizar no pase de la talla 16.
Para aquellos estudiantes de secundaria y preparatoria que requieren de tallas más grandes, el precio aumentará y estará entre los 3,699 y los 6,299 pesos en un traje de tres piezas que consta de saco, chaleco y pantalón.
A estos costos algunas familias deben aumentar el precio de la camisa, la corbata o el moño, así como zapatos en caso de que no cuenten con algunos de tipo formal.
De acuerdo con el encargado, algunas familias optan por comprar una talla más grande y hacer ajustes para que en algún momento, cuando el chico crezca, siga usándolo y la inversión sea más redituable.
Una situación similar ocurre con las tiendas de vestidos, aunque sus previsiones de aumento son de aproximadamente el 30 %, pues generalmente su público es para adolescentes que se gradúan de la preparatoria o de la universidad.
Los costos para adquirir un vestido pueden ser menores a los de un traje, ya que hay algunas prendas desde los 900 hasta los 3,000 pesos, dependiendo de la marca de la tienda en la que deseas adquirirlo.
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