Fracasa Puebla en erradicar las bolsas de plástico

A pesar de que tiene cuatro años de que se avaló la prohibición de bolsas plásticas de un solo uso, popotes y envases de unicel, hoy en día podemos ver que dichos productos continúan circulando sin que la autoridad estatal o municipal aplique las sanciones correspondientes.

Justamente, el 3 de julio se conmemora el Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico, el cual tiene como fin hacer conciencia sobre los plásticos de un solo uso y lo dañino que resulta para el medioambiente al momento de desecharlos, pues la mayoría no es biodegradable.

En Puebla, el uso de plásticos de un solo uso, popotes y envases de unicel no debería de ser un tema de discusión tomando en cuenta que fue el 15 de mayo de 2019 cuando el Congreso del Estado aprobó la prohibición de bolsas de plástico en todo el estado.

En el caso de Puebla, se estableció un plazo para que todos los municipios se homologaran con esta modificación, a fin de que todos tuvieran en su marco normativo local las facultades para sancionar el uso de estos plásticos.

En el caso del municipio de Puebla, encontramos que no solamente se prohibieron las bolsas de plástico, sino también los popotes y envases de unicel, además se otorgó un periodo de concientización para que los comerciantes y usuarios aprendieran a vivir sin estos artículos.

De este modo se aprobó que en la capital, que es el municipio donde más residuos sólidos se generan diariamente, se aplicaran multas a partir del 1 de mayo de 2020 a aquellos establecimientos que siguieran proporcionando envases de unicel, popotes y bolsas de plástico de un solo uso.

En el marco normativo únicamente se establecen sanciones y vigilancia a los comercios establecidos como tiendas de abarrotes, ropa, supermercados, restaurantes, pero no así sobre los mercados de apoyo o los mismos negocios ambulantes.

La ley establece que las multas, según la gravedad o reincidencia de la violación, van de los 1,200 a los 42,000 pesos y en algunos municipios también se contempla la cancelación de la licencia de funcionamiento para el negocio que incurra en la violación de esta legislación.

¿Qué pasa en realidad?

Aunque se trata de una medida que busca modificar los patrones de consumo de la sociedad para que estos se vuelvan más conscientes con el medioambiente, lo cierto es que tanto negocios como clientes continúan ignorando esta legislación.

Los supermercados y tiendas de ropa en centros comerciales son los que más han acatado esta ley, ninguna tienda de autoservicio proporciona bolsas de plástico, al igual que algunas tiendas de ropa, mientras que otras optan por vender bolsas de tela reciclables o entregan los artículos en empaques de papel reciclado.

Este esfuerzo contrasta con el de los pequeños negocios que continúan entregando bolsas de plástico a los clientes, sin temor de ser sancionados, porque simplemente no hay recorridos para vigilar que se cumpla con la ley.

Pocos son los pequeños negocios en los cuales se evita por completo el uso de bolsas de plástico, pues la mayoría se limita a no ofrecerla de facto, pero sí entregarla cuando el cliente la pide.

Otra medida que viola la ley, pero es aplicada por los negocios, es no regalar las bolsas de plástico, sino venderlas por tarifas módicas que van de 1 hasta 5 pesos, precios que pueden resultar bastante convenientes para muchas personas que prefieran utilizar una bolsa para llevarse sus artículos.

Desde que empezó a aplicarse esta ley, muchos de los comerciantes se mostraron inconformes, pues lejos de ver el beneficio al medioambiente, acusaron que esto repercutiría negativamente en sus ventas, ya que los clientes ven a los negocios con la obligación de entregar este tipo de artículos, por lo que de no hacerlo podría alejar a los clientes.