Trámite de pensiones: quiénes son elegibles y cómo iniciar el proceso

Las pensiones son un beneficio económico que recibe una persona al momento de concluir su vida laboral, por lo que son una prestación fundamental para la planeación y certeza de los trabajadores mexicanos. Existen diferentes modalidades de pensión a las cuales los trabajadores pueden acceder, dependiendo de su situación laboral y cumplimiento de requisitos específicos. 

 
Las pensiones representan un instrumento para sustituir los ingresos laborales que deja de percibir una persona al dejar de laborar, condición esencial para proteger la subsistencia en la edad adulta mayor. Mientras que algunos trabajadores tienen acceso a esquemas de ahorro para el retiro, otros tienen acceso a ingresos para la vejez que están atados a esquemas laborales donde el gobierno asegura un beneficio pensionario durante su retiro.  

En México, existen diferentes modalidades de pensión que se pueden asegurar mediante diversos esquemas. A continuación, se mencionan las principales modalidades de pensión y los criterios para poder tramitarlas: 

 
1. Pensión por cesantía en edad avanzada y vejez: Esta modalidad de pensión está dirigida a trabajadores asegurados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Para poder acceder a esta pensión, se deben cumplir los siguientes requisitos: 

   - Tener 60 años o más para hombres y 55 años o más para mujeres. 

   - Contar con al menos 1,250 semanas de cotización al IMSS. 

   - Estar dado de baja en el régimen obligatorio de la seguridad social. 

   - No estar trabajando de manera formal. 

 
2. Pensión por invalidez: Esta pensión se otorga a aquellos trabajadores asegurados que sufren una invalidez que los incapacita para trabajar. Los requisitos son: 

   - Tener una incapacidad que disminuya la capacidad de trabajo en un porcentaje mínimo del 50 %. 

   - Contar con al menos 150 semanas de cotización al IMSS, de las cuales 125 deben ser semanas cotizadas en los últimos cinco años. 

 
3. Pensión por viudez y orfandad: Esta pensión está dirigida a viudas, viudos y huérfanos de trabajadores asegurados que fallecieron. Los requisitos varían dependiendo del caso y se deben consultar con el IMSS o el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE). 

El cálculo del monto de la pensión se basa en el salario base de cotización del trabajador durante su vida laboral. Este salario se ajusta con base en la Unidad de Medida y Actualización (UMA), que es la referencia económica para determinar la cuantía del pago de las obligaciones y supuestos previstos en las leyes federales, de las entidades federativas, así como en las disposiciones jurídicas que emanen de todas las anteriores. 

 
El IMSS toma en cuenta los últimos cinco años de cotización y calcula el promedio de las últimas 250 semanas para determinar el monto de la pensión. Además, se considera el factor de actualización, el cual se basa en la esperanza de vida del trabajador y se utiliza para ajustar el monto de la pensión conforme al periodo en el que se recibirá. 

 
Es importante mencionar que existen otras modalidades de pensión, como la pensión por cesantía en edad avanzada y vejez para trabajadores del ISSSTE, así como sistemas de pensiones privados y especiales para ciertos sectores laborales. Los requisitos y cálculos pueden variar en cada caso, por lo que se recomienda consultar las normativas y acudir a las instituciones correspondientes para obtener información precisa y actualizada. 

Los retos de las pensiones en México 

Durante años el sistema de pensiones mexicano ha sido sujeto de reformas con el objetivo de balancear al menos tres objetivos de política pública: 

1) ampliar la cobertura y acceso al sistema de ahorro para el retiro. 

2) mejorar la tasa de reemplazo de manera que los trabajadores tengan una pensión suficiente para cubrir sus necesidades durante su retiro. 

3) disminuir presiones sobre las finanzas públicas, a pesar de los cambios de política, el sistema está fragmentado en diferentes esquemas que no están interconectados ni tienen concordancia en su funcionamiento. 

 
De acuerdo con datos del Instituto Mexicano para la Competitividad, las actuales condiciones del sistema de seguridad social hay un sector de la población que no participa en ningún sistema de ahorro, así como no cuenta con ingresos suficientes para ahorrar y se ve orillado a continuar trabajando o depender de apoyos económicos externos para subsistir. 

 
Por ello, los especialistas coinciden en que la próxima potencial reforma al sistema debe dar prioridad por integrar los diferentes esquemas existentes e incrementar la cobertura del sistema de pensiones.