El presidente de la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA), Gianni Infantino, manifestó su solidaridad con el jugador brasileño del Real Madrid Vinicius Júnior, que volvió a ser objeto de insultos racistas en el partido contra el Valencia de la pasada jornada de LaLiga española.
Antes y en el transcurso del encuentro disputado en el Estadio Mestalla que acabó con la victoria de Valencia por 1-0, la hinchada del equipo valenciano gritó insultos racistas y obscenos al delantero del Madrid, como "mono".
El propio futbolista señaló a través de un mensaje en su cuenta de Twitter que el campeonato español "hoy es de los racistas" y expresó que España "accedió a exportar al mundo la imagen de un país racista".
"Estoy completamente de acuerdo con Vinicius. No hay lugar para el racismo en el fútbol y en la sociedad, y la FIFA está con todos los jugadores que se encontraron en esta situación. Los hechos ocurridos en el partido entre el Valencia y el Real Madrid así lo demuestran", afirmó Infantino en un videomensaje publicado en redes sociales.
Recordó que los torneos de la FIFA se rigen por un procedimiento de tres etapas recomendado para todas las competiciones de fútbol: primero, el partido debe ser detenido y hay que anunciarlo; segundo, los jugadores deben abandonar la cancha hasta que cesen los insultos, de lo contrario el encuentro será aplazado; tercero, el partido se reanuda, pero si los insultos continúan, el juego se detiene y se conceden tres puntos al equipo contrario.
"Estas normas deberían aplicarse en todos los países y en todas las ligas. Obviamente, es más fácil decirlo que hacerlo, pero tenemos que hacerlo y tenemos que apoyarlo a través de la formación", insistió el jefe de la FIFA.
El Real Madrid presentó una denuncia por los delitos de odio y discriminación contra la estrella brasileña ante la Fiscalía de España, calificando los insultos de "un ataque directo al modelo de convivencia de nuestro Estado social y democrático de derecho".
A su vez, el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, comentó que España tiene un problema de racismo y si hay un aficionado o un grupo de indeseables que insulte, por ejemplo, por color de piel o credo, esto mancha no solo al todo el equipo, el club, sino a todo el país. LaLiga también inició ese mismo día su propia investigación al respecto.
El jugador brasileño, de 22 años, ha sido objeto de expresiones racistas durante varios partidos de la actual temporada del certamen español, en particular, el pasado septiembre ante el Atlético de Madrid en el Metropolitano, en el juego contra el Barcelona en el Camp Nou en marzo pasado y contra el Real Mallorca un mes antes.
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